22 de diciembre de 2017
La pequeña y mediana empresa copa la población de compañías en España, suponiendo más de un 99% del tejido productivo. Sin embargo, se suelen identificar entre sus flaquezas la productividad, la internacionalización y el tamaño. La pyme española ha contado en los últimos años con poco acceso a financiación, después de que las entidades de crédito cortaran el grifo, tienen dificultades a la hora de captar y retener el talento e innovan poco. Y eso que la transformación digital es fundamental para ocupar posiciones competitivas.
Poco a poco, al menos, las empresas españolas se van internacionalizando, aprovechando su potencial exportador. Es más, los expertos plantean esta cuestión en términos absolutos: conquistar más allá de las fronteras o perecer.
Una disciplina útil a la hora de conseguir el objetivo es el marketing online. Las agencias ofrecen claves generales como hoja de ruta, además de involucrarse con sus clientes en la búsqueda de oportunidades y en el desarrollo de una campaña que resulte efectiva.
La barrera del idioma
No todo es proponérselo y empezar a vender, claro. De hecho, la identificación de nuevos mercados no es la primera barrera que un empresario ve en la internacionalización, sino otra más evidente: el idioma. También hay que herramientas, sin embargo, que vienen a cubrir la necesidad de entenderse, y no hablamos de clases de inglés.
The Global Password es una plataforma de interpretación y traducción online, que se presenta a sí misma como “una nueva manera de entender la traducción”. Gracias a las últimas tecnologías, ponen al servicio de sus clientes a un intérprete que se hace presente en Videoconferencias, por ejemplo, pero que también ayuda en el seguimiento de encargos o en la supervisión de plazos.
La plataforma online se compromete a hacer llegar un presupuesto instantáneo para sus servicios de Traductores profesionales, a partir de la necesidad que tenga el cliente. “Nuestros servicios de traducción e interpretación globales te permiten acceder a nuevos mercados, con mayores posibilidades de éxito y a bajo coste”, explican en su web.
Sus servicios consisten, en definitiva, en la traducción de todo tipo de documentos, y se comprometen con la calidad y con los plazos de entrega. Sus intérpretes profesionales, por otra parte, asisten de forma online en reuniones cara a cara o por videoconferencias. Su tercer pilar de servicios son los eventos, a los que llevan, dicen, “un innovador sistema online de interpretación a distancia”, accesible desde el móvil para los asistentes.
Traducción en redes sociales, un principio
Esté al frente de una microempresa con dos personas en plantilla, como podría suceder en una tienda de barrio, o de una compañía mediana de menos de 250 empleados, muchos emprendedores ya se han convencido del potencial de las redes sociales. Es una forma de hacerse más presente ante sus clientes y potenciales clientes, abrir un nuevo canal de comunicación con ellos, poder desarrollar campañas específicas.
Si la empresa tiene o pretende tener presencia en otros países, querrá aprovechar las ventajas de las redes sociales también en ellos. Desde su blog, The Global Password indica que hay que tener en cuenta, sin embargo, que cada una tiene su propio lenguaje, su propia jerga, que será diferente en cada país.
Además, aunque mucho contenido se pueda planificar con antelación, en otros casos habrá que dar respuestas inmediatas, y cuanto menos tiempo se necesite de media, mejor. En ese caso, un servicio de traducción exprés puede ser de utilidad.
Por otra parte, la empresa reconoce que las redes son un arma de doble filo. Con buen contenido la respuesta será positiva, pero la mala calidad corre el peligro de hacerse viral, y eso tendrá graves repercusiones. Es importante no cometer errores.
Atraer a visitantes extranjeros a la web
Las redes sociales y la página web, sin duda, proporcionan una vía de acceso para potenciales clientes de todo el mundo. Los primeros contactos con ellos, las primeras ventas, serán el paso previo a la internacionalización. Pero, ¿cómo atraer visitantes extranjeros a la web de la empresa? The Global Password también da unas claves para ello.
La primera está en el SEO, la optimización para motores de búsqueda, que permite a la web posicionarse bien y facilita al público encontrar la web. Entre las acciones a realizar en su marco está la localización del contenido, de forma que la página no sea una mera traducción del español, sino que esté adaptada a los países a los que se dirija.
La segunda clave también está en el marketing online, en este caso, en el SEM. The Global Password recuerda que Google sigue siendo el rey de los buscadores, pero que Rusia o China, dos mercados importantes, tienen los suyos propios. En cada mercado hay que hacer un estudio de keywords específico.
Además, en algunos lugares tienen mucha fuerzas ciertos mercados online, como sucede en China con Alibaba. Ofrecer productos en su catálogo también ayuda al posicionamiento de la página propia y abre posibilidades.
El linkbuilding, el mailing, los SMS y las redes sociales (de nuevo) son también fundamentales para la atracción.