Digital Sevilla
18 de enero de 2018
Esta infección comienza, normalmente, por pequeñas erupciones en la piel, que se manifiestan como pequeños granos rojos, y que poco a poco empiezan a ocupar más y más zonas de nuestro piel, hasta que se vuelven muy visibles y francamente molestos, porque producen un picazón casi insoportable. Además, un gran problema de estos compañeros es que tienen una gran facilidad para propagarse a otras partes de nuestro cuerpo, así como a las personas que nos rodean.
Los hongos pueden aparecer por diversos motivos, el principal es el contagio de otro, y es que son fácilmente propagables y lo que los hace más peligrosos. También suelen estar asociados a malos hábitos higiénicos, así como a una excesiva humedad en ciertas zonas, deficiencias en nuestra alimentación que pueden hacer que tengamos una mayor facilidad para cogerlos, así como por tocar determinadas cosas que puedan estar infectadas. Lo bueno es que son relativamente fáciles de eliminar, pero duraderos en el tiempo, es decir, podemos curarlos con determinados medicamentos o remedios caseros, como los de www.curarhongos.com pero son unos compañeros que van a estar con nosotros una larga temporada, pero los vamos a mantener a raya para que no nos produzca picazón, así como para evitar contagiarlos a las personas que nos rodean.
Como hemos adelantado, las razones por las que aparecen suelen ser variadas, pero lo que sí es cierto es que ambientes húmedos y calurosos favorecen su aparición. Pueden producirse por la falta de higiene en zonas localizadas, como en las uñas o cuero cabelludo, así como por el exceso de humedad en éstas mismas. Por un exceso de sudoración que va a favorecer que tengamos ciertas zonas con constante humedad. La ansiedad y el estrés también pueden estar ligados, ya que harán que nuestro sistema inmunológico se vea afectado y por lo tanto sea débil, lo que nos hará vulnerables y fáciles candidatos para tener hongos o que nos lo contagien otras personas, ya sea por contacto directo o por prendas de ropa.
Lo primero de todo decir que lo más importante es que acudamos a nuestro médico a fin de que él nos observe y nos verifique si lo que tenemos son hongos o no, vamos a evitar la automedicación, ya que muchos de los síntomas de los hongos se pueden confundir con otras dolencias o infecciones. Además, también nos podrá decir en caso de padecer hongos qué tipo tenemos, y el mejor tratamiento para éstos.
Bien, los principales síntomas de los hongos son algunos de los ya mencionados: piel roja, granos, erupciones en la piel en zonas localizadas (piernas, brazos, cabello...) irritación, picazón, cambios en el color de la piel o de las uñas, incluso granos con pus. Si tenemos alguno o varios de estos síntomas lo más seguro es que los padecemos, pero no lo dudes acude a tu médico, es lo principal.
Como en cualquier tipo de infección, existen diferentes tipos, aunque los más comunes suelen ser la tiña, que es la que se produce en uñas, cabello y piel. El pie de atleta, posiblemente el más conocido, ya que suele contagiarse porque suele ser frecuente entre deportistas y afecta a los pies. Y la candidiasis, suele afectar a la axilas, ano, alrededor de los dedos, zonas genital, con tonos muy rojizos como nota característica de este tipo de hongos.
Como ya hemos dicho, combatir los hongos es relativamente sencillo, el problema reside en que es una infección que tienden a durar en el tiempo, por lo que a la larga pasa a convertirse en un tratamiento cuanto menos tedioso, pero existen muchos remedios caseros que nos van a ayudar a agilizar este proceso.
Zumo de limón, sólo bastará extraer el jugo de los limones y dejarlo en un recipiente donde introduciremos las zonas afectadas, sobretodo es muy eficaz si los hongos se encuentran en las uñas.
Bicarbonato, es un ingrediente utilizado para un sin fin de cosas, y tratarse de un elemento alcalino va a ser muy útil para combatir hongos o cualquier microbio, tan sólo será necesario aplicarlo junto con el zumo de limón en las zonas afectadas.
Yogur natural, al contener bacterias activas tiene una gran función para tratar muchas infecciones producidas por los hongos, solo será necesario que lo apliquemos en la zona y dejarlo actuar unos minutos. Luego es muy importante eliminar los restos con agua tibia y asegurarnos de que no queda la zona húmeda.
Ajo, es uno de los mejores elementos para combatir este tipo de infecciones ya que tiene una fuerte acción antibiótica que favorece la eliminación de gérmenes y hongos. Deberemos hacer una especie de pasta con los ajos, y meterla en agua tibia, donde introduciremos luego nuestras manos o pies durante quince minutos o más. También podemos mezclar el ajo con aceite de oliva y orégano para potenciar la acción.
Uno de los principales motivos para su aparición es la falta de higiene tanto personal como en nuestros enseres, por eso es muy importante que lavemos frecuentemente la ropa, a fin de evitar el contagio a otra persona, además de que la lavemos por separado, así como usar solo nosotros las toallas y demás prendas de baño. Secarse bien la piel, para evitar que ésta pueda tener exceso de humedad o sudoración. Es muy importante llevar una alimentación sana y adecuada, así como unos hábitos saludables en nuestra vida cotidiana.
El tratamiento es sencillo: buena higiene, evitar la humedad, y utilizar las cremas específicas para tu tipo de hongos, si la infección sigue ahí pasado un tiempo, lo mejor será comenzar a tomar ciertos medicamentos específicos por vía oral, a fin de tener un tratamiento más fuerte para erradicarlos.
