Redacción - 29 de marzo de 2019
David Nutt, profesor del Imperial College de Londres y su equipo, han creado una bebida llamada Alcosynth, que imita los efectos del alcohol pero no tiene efectos secundarios de náuseas, dolor de cabeza o sequedad de boca.
El antiguo miembro del Consejo Asesor sobre el Abuso de Drogas del Gobierno del Reino Unido, ha patentado 90 tipos de Alcosynth y espera que para 2050 hayan sustituido todos los alcoholes normales en las bebidas que te animan a abrazar farolas, coser la calle o a beber el agua de los charcos.
Nutt ha estado investigando durante mucho tiempo el llamado Alcosynth, que proporcionará las cualidades relajantes del alcohol, pero sin dejar resaca ni tenerte tirado en el sofá diciendo “nunca más”.
Piensan vender la bebida a toda la industria del alcohol para incluirlo como ingrediente activo en sus propias bebidas, así los consumidores no tendrán que cambiar su bebida favorita.
El profesor Nutt y su socio comercial, David Orren, ya han recaudado 20 millones de libras de inversores para llevar el Alcosynth al mercado y a los bares.
