7 de agosto de 2019
La radiación emitida por los fosfoyesos situados a pocos kilómetros de la bonita ciudad de Huelva estarían superando por seis la dosis máxima recomendad por el Consejo Superior Nuclear.
Según publica el diario digital Moncloa.com, nuevas mediciones habrían dado estas alarmantes cifras.
Entre los vertidos químicos se detectó Cesio 137, un material radiactivo, en alta cantidad.
Estos residuos provienen de la industria agroquímica que se instaló en la ciudad durante la dictadura franquista y que llegó a ser calificada como un auténtico "ecocidio".
En total, las balsas contienen más de 100 millones de toneladas de materiales contaminados.
La empresa responsable, Fertiberia, fue condenada en firme a retirarlos.
Sin embargo, la medida propuesta por al compañía, echar tierra encima, no convence a las autoridades, por lo que al no ponerse de acuerdo siguen ahí, a pocos kilómetros de una ciudad de 150 mil habitantes ante la pasividad de los políticos que prefieren centrarse en otras cosas.