Publicado: 31 de octubre de 2019 12:16 (GTM+2)
Instagram censuró las fotos de un cocido gallego por «infringir las normas comunitarias» las cuales incluyen «violencia gráfica, lenguaje que incita al acoso, violencia y bullying o desnudos y actividad sexual».
No quedó ahí la cosa, ya que la red social junto a Facebook han prohibido usar 'emojis' de berenjenas y melocotones cuando tengan connotaciones sexuales.
Pero la ola de puritanismo ha llegado incluso a instituciones públicas y a un sector libre, el arte.
Las esculturas del artista francés Stephane Simon fueron expuestas en la sede de la Unesco en París con las ‘partes íntimas’ tapadas con tangas.
No eran parte de la obra sino una imposición del organismo para “no herir la sensibilidad del público”.
La exhibición 'In Memory of Me' (En memoria mía) no tiene connotaciones eróticas y expone una colección de esculturas de desnudos que simulan estar haciéndose un selfi.
Según detalla Le Figaro, el ente internacional había hablado con Stephane Simon y le exigió que tapara el sexo de las figuras.
Pour «ne pas heurter certaines sensibilités», l'Unesco basée à Paris, a caché sous un slip les sexes de deux statues de l'artiste Stéphane Simon https://t.co/8B80QSrEZP @HypathieBlog pic.twitter.com/KkSriw8vww
— L'important (@Limportant_fr) October 26, 2019
La noticia ha provocado la indignación lógica en las redes sociales ante tamaña gilipollez. Estaremos atentos por si alguien prohíbe mostrar seres humanos.