Miguel Ángel Olimpo - 14 de mayo de 2020
En las grandes obras de construcción es común que se utilicen maquinarias resistentes que permitan realizar los trabajos de forma eficiente y sin poner en riesgo la seguridad de los trabajadores. Entre la amplia variedad de máquinas que se pueden utilizar a nivel industrial, unas de las más utilizadas son aquellas que han sido diseñadas para facilitar el traslado y la manipulación de materiales pesados, tales como los carros portabobinas, los balancines de carga y los cilindros hidráulicos.
Un coil car o carro portabobinas en español, es una plataforma móvil que permite el traslado de todo tipo de carga de forma segura y eficiente. Este tipo de maquinaria cuenta con distintos modelos con la finalidad de ofrecer un amplio campo de aplicación que se adapte a las necesidades del tipo de trabajo que se necesite realizar. Dentro de la variedad de opciones disponibles se pueden encontrar carros portabobinas que funcionan sobre rieles, otros con ruedas para superficies planas y, también, se pueden hallar modelos autónomos o motorizados que ofrecen cierta independencia en el traslado de cosas pesadas.
Las principales características que permiten identificar cuál es el carro portabobinas apropiado se basan en la velocidad con la que estas máquinas se mueven, la capacidad para recorrer distintos tipos de superficies, el tipo de mando que tienen incluido y los niveles de seguridad que garantizan. Otros aspectos importantes que se deben considerar son el tipo de rodadura con el que funcionan, por ejemplo, si tienen tracción trasera o doble eje y, el tipo de alimentación que utilizan, ya sea un enrollador, mediante batería o inducción magnética.
Adicionalmente a las especificaciones antes mencionadas, dependiendo de las necesidades del sitio de trabajo, también se pueden encontrar modelos personalizados que incorporan mayores opciones de movimiento, como elevaciones o giros, que tengan un tipo de accionamiento hidráulico que les entregue mayor potencia o que sean diseñados con un sistema de rodadura que se adapte a la superficie del sitio de trabajo.
Otra maquinaria fundamental para el manejo de cargas, son los balancines separadores, que facilitan la manipulación de distintos tipos de objetos de gran volumen y peso de forma segura. En el mercado se puede encontrar un amplio abanico de opciones que se adaptan al peso y al tipo de carga, tales como el spreader beam lifting que se caracteriza por ser un equipo ligero y versátil para trabajar con cosas de diferentes pesos y longitudes.
Esta maquinaria es comúnmente utilizada en construcciones y aduanas, ya que tanto el spreader como los balancines, son recursos fundamentales para la elevación de cargas pesadas que requieren un sistema de grúas. Al momento de adquirir este tipo de maquinaria lo más recomendable es optar por opciones certificadas que cumplan con todos los parámetros de seguridad establecidos por la Ley.
Con el objetivo de facilitar el trabajo y aumentar la efectividad, lo mejor es optar por balancines ligeros, versátiles, y de montaje rápido y sencillo que permitan optimizar el trabajo de la grúa en el proceso de levantamiento.
Los sistemas hidráulicos son uno de los mejores inventos en el sector de la mecánica cuando se trata de maquinaria que necesita implementar mecanismos de presión. En este sentido, los cilindros hidráulicos son uno de los mejores recursos para realizar elevaciones de cargas pesadas, ya que pueden soportar desde 5 hasta 1.500 toneladas.
Los cilindros hidráulicos se han convertido en un recurso indispensable en distintos sectores industriales, ya que son un tipo de maquinaria a la que se le puede dar múltiples usos, gracias a su flexibilidad y potencia, permitiendo facilitar la manipulación de grandes cargas en cualquier sector. Una de las principales ventajas que ofrece este tipo de maquinaria es que cuentan con una potencia controlada que se adecua al tipo de trabajo que se desee realizar, garantizando en todo momento la seguridad de los trabajadores.
