Vicki Vera - 27 de julio de 2020
Si bien es verdad que la situación por el COVID-19 ha cambiado cómo vemos la vida, el comercio es uno de los sectores que más se ha visto afectado. Por ejemplo, se ha hecho más uso de las tiendas online.
Además, está claro que quien más ha sufrido la crisis es el pequeño empresario. En la mayoría de casos ha tenido que adaptarse rápidamente, mientras que otros no han podido hacerlo. Ya fuera por falta de recursos o desconocimiento.
Pero lo que más se ha notado es el uso de las TIC. Las llamadas tecnologías de la información y comunicación han sido fundamentales en todos los aspectos de la vida. Trabajo, educación y comercio no hubieran conseguido tanto de no ser por ellas.
Por eso mismo, cabe destacar que se hubiera podido impedir el drástico impacto negativo en el pequeño comercio de haber estado más digitalizado. Está claro que es un reto para el sector, pero también necesario. Aunque las empresas grandes lo tengan más fácil por sus recursos, sobre todo dinero y mano de obra, el pequeño comercio debe aproximarse al medio online.
Un ejemplo es el de aquellas personas o comercios que querrían haber seguido con sus proveedores de confianza pero no pudieron por no tener una opción digital. De esa manera salen perdiendo los proveedores, quienes lo solicitan y, seguramente también, los clientes.
Para que esto no se vuelva a dar, los pequeños comercios tienen que seguir una estrategia digital. Es un cambio que hay que abordar, por ejemplo, construyendo una página web con un catálogo actualizado y exhaustivo de los productos o servicios. Además, una buena gestión de marca, la interacción con los clientes, un uso adecuado de las redes sociales es lo ideal en estos casos. Aunque, por supuesto, todo esto depende de numerosos factores, como son el sector, el público objetivo y los productos o servicios. Esto hará que haya que seguir una u otra estrategia.
Respecto a esto, hay algunos proyectos que tienen como iniciativa acercar el mundo digital a los pequeños comerciantes. Encontramos el proyecto Sevilla Digital, que tiene algunas acciones como son jornadas de sensibilización, para concienciar de la necesidad de incorporar las nuevas tecnologías en el negocio, o una plataforma de marketplaces donde incluir a los comercios.
Este plan está enfocado únicamente en Sevilla, pero es una gran iniciativa que se ha extendido por otras ciudades, para hacer que los pequeños comerciantes den el salto al comercio electrónico de una manera segura. Además, no solo ofrece un "escaparate" digital de estos negocios, sino que hace un análisis previo de la situación de los comercios, acciones de transformación digital, de promoción y de difusión.
Sin embargo, la pandemia no solo ha traído cosas malas —aunque esa sea la impresión—. Por ejemplo, hemos visto cómo se han ofertado puestos de trabajo que antes de esta situación estaban más parados. Además, ha hecho que muchos negocios se actualicen. Como decíamos antes, algunos pequeños empresarios han conseguido adaptarse.
En definitiva, la situación por el coronavirus ha hecho imprescindible el uso de las nuevas tecnologías. Sobre todo en pequeños comercios, donde su digitalización es fundamental para no perder dinero.
