23 de septiembre de 2020
Todo empresario es consciente de la importancia de contar con un buen asesor laboral para el óptimo desarrollo de su actividad empresarial, de manera que resulta una figura imprescindible en materia de derecho del trabajo y de la Seguridad Social.
Los recursos humanos son uno de los pilares fundamentales de cualquier empresa, pues suponen la clave de bóveda para su desarrollo, crecimiento y buena marcha. Es por ello por lo que la figura del asesor laboral, dadas las funciones que desempeña, es de gran importancia para las empresas.
La principal función de todo asesor laboral es la relacionada con las relaciones laborales básicas o gestiones diarias con el personal, empezando por los procesos de selección y reclutamiento.
En este sentido, es fundamental la labor del asesor laboral en la definición de los criterios de búsqueda y en el diseño del proceso de manera que se consiga contratar a la persona que mejor responda a las necesidades concretas del empresario para cada puesto de trabajo.
Además, se encarga de todas las cuestiones relacionadas con la contratación de los trabajadores, tales como la formalización, modificación, prórroga, suspensión y/o extinción de los contratos laborales.
Asimismo, se ocupan de todo lo relacionado con el salario, el tiempo de trabajo, jornadas, descansos, permisos y vacaciones, así como de cualquier cuestión de relevancia para el personal, como su formación.
Como corolario de todo lo anterior, también corresponde al asesor laboral el asesoramiento y defensa ante cualquier tipo de inspección, infracción o sanción que pueda acaecer en la empresa en materia laboral.
Los asesores laborales deben asesorar, asimismo, en materia de representación colectiva y sindical, así como en todo lo relativo a la negociación y convenios colectivos de aplicación.
Otra importante función que corresponde a la figura del asesor laboral es en el apartado de prevención de riesgos laborales y en lo relativo a los planes de seguridad, salud e higiene de los trabajadores la compañía.
Por último, pero no por ello menos importante, una de las funciones principales de todo asesor laboral son las cuestiones relacionadas con la Seguridad Social.
Estos profesionales están especializados en todo lo relativo a la inscripción de las empresas en el sistema de Seguridad Social, afiliación, alta y bajas de los trabajadores, gestión de las cotizaciones y diferentes situaciones relacionadas con la incapacidad y las prestaciones, y variación de sus datos o del régimen de la Seguridad Social que en cada caso corresponda.
En este sentido, los asesores laborales asesoran a las empresas no solo en relación con el Régimen General de la Seguridad Social o el Régimen Especial del Trabajador Autónomo, sino también en todos los regímenes especiales, como los de trabajadores del mar o agrario, y todo tipo de convenios especiales.
Como podemos comprobar, las funciones desarrolladas por un asesor laboral nos dan una idea de la importancia clave que esta figura tiene para el adecuado funcionamiento de cualquier empresa, toda vez que el capital humano es el más valioso para cualquier organización.