Vicki Vera - 2 de marzo de 2021
Se incluyen los aspectos logísticos y de recursos. El precio de la electricidad y del petróleo que afectan al almacenamiento de los productos (los lugares en los que se almacena) y a la distribución del mismo (los medios de transporte que se utilizan para transportarlos). En este segundo punto hay que tener en cuenta si la distribución será a nivel nacional, internacional o de ambas. Dependiendo de una u otra hay que tener en cuenta otros gastos adicionales como el precio del transporte marítimo o aéreo. El diseño del envase, el etiquetado y el material en que se fabrique también va a determinar el precio. Los envases están fabricados con diversos materiales como plástico, vidrio o bag in box.
El tamaño de la cosecha es el factor más importante. Una cosecha grande tiende a hacer descender el precio y, por el contrario, una cosecha pequeña alza los precios. Por otro lado, la competencia con otros países productores de aceite de oliva también influye en ello. Y en ocasiones genera que los productores tengan que establecer precios similares para evitar perder dinero. La calidad es el tercer factor determinante. La acidez es el indicador principal de la calidad. La acidez es una anomalía resultante del mal estado de los frutos o mala conservación. A menor acidez, mayor calidad.
El precio del aceite de oliva virgen extra (AOVE) suele tener un precio más elevado debido a que son de mayor calidad. Hay que tener en cuenta que el AOVE se extraen por medio de procedimientos mecánicos. Además, se considera que este tipo de aceite no tiene ningún defecto. Otros factores que determinan la calidad del aceite de oliva es el índice de peróxidos, que señala el estado de oxidación inicial de un aceite y el deterioro que ha sufrido, y la espectrometría UV que determina la absorbancia a diferentes longitudes.
El precio del aceite de oliva cambia constantemente y muchas veces es difícil tenerlo controlado. En CBH hay un visor de precios para el mercado del aceite de oliva con precios actualizados e histórico de los últimos meses. De esta manera productores y compradores (y otros intermediarios), pueden conocer en tiempo real el precio medio que se está pagando por cada uno de los tipos de aceite.
En definitiva, los principales factores que afectarán el precio del aceite de oliva es el tamaño de la cosecha, la calidad, los costes logísticos para la distribución del producto y los costes de fabricación. Por ello, es importante hacer un seguimiento del precio y sus fluctuaciones para tomar decisiones desde el conocimiento.
