
12 de mayo de 2022
Madrid es un centro de negocios de importancia mundial, de manera que, aunque tengamos una empresa en Sevilla nos puede interesar tener presencia en la capital, algo que ahora es muy sencillo y económico.
Gracias al servicio de oficina virtual en madrid, podemos domiciliar nuestra empresa allí y contar con instalaciones sin tener que alquilar un espacio físico, lo cual nos servirá para abrir nuevos frentes en el complejo mundo de la empresa.
En el mundo de los negocios tener una marca potente es muy importante. No es lo mismo que en los documentos de nuestra empresa aparezca una dirección desconocida de un barrio cualquiera de Sevilla, que la de un importante centro de negocios madrileño.
Ahora, por una pequeña cuota mensual, nuestro negocio contará con una dirección física en un lugar que reconocen los empresarios de todo el mundo, lo que nos dará prestigio y nos puede servir para establecer un primer contacto.
Otra de las ventajas que vamos a tener es que dispondremos de personal que se encargará de atender las llamadas telefónicas y otras comunicaciones que recibamos.
De esta forma, contaremos con un servicio de secretaría que hará labores de recepción, liberando nuestro tiempo y ahorrándonos dinero, algo esencial sobre todo para aquellos negocios que están empezando.
Con la domiciliación de sociedades madrid también tendremos acceso a una serie de servicios que van más allá de una dirección que aparece en los documentos de la empresa o en la que recibimos la correspondencia.
Estos centros de negocios en los que estará la sede social de la empresa disponen de salas en las que nos vamos a poder reunir con los clientes, preparadas para hacer presentaciones, realizar formaciones o incluso eventos.
La capital española es uno de los centros europeos de negocios por excelencia y tiene unas conexiones inmejorables con todo el mundo a través de su aeropuerto, por lo que los clientes de cualquier país podrán visitar nuestro negocio sin problemas.
Cada vez son más las personas que trabajan de manera remota y que lo hacen desde cualquier lugar, así que una buena idea es poner la dirección de la empresa en Madrid, mientras podemos desarrollar nuestra actividad en un pequeño pueblo sevillano al margen de los inconvenientes de las grandes ciudades.
Los clientes verán que nuestra empresa está en una de estas importantes sedes madrileñas y eso les dará más confianza a la hora de trabajar con nosotros, pues pese a que el servicio que damos sea excepcional, nunca debemos olvidar el prestigio que nos da un gran centro empresarial.
Aunque en el mundo de la empresa la atención a los clientes lo es todo, lo cierto es que en un primer contacto la imagen es muy relevante. Por eso, podemos domiciliar nuestro negocio en Madrid, obteniendo una dirección de un centro empresarial reconocido en todo el mundo.