Vicki Vera - 18 de abril de 2023
Las mopas son uno de los utensilios de limpieza más usados, compartiendo los primeros puestos para esta tarea con la fregona y la escoba. Lo cierto es que son lo más adecuado cuando se trata de superficies grandes o de un ámbito de limpieza profesional.
Hay varios tipos de mopas como las mopas de algodón, las de microfibra y las industriales (después veremos sus principales características).
Las mopas surgieron en España gracias a Manuel Jalón, un militar e ingeniero aeronáutico de Logroño que tuvo la gran idea de unir a un palo unos cabos o unas tiras de algodón que hasta se podía escurrir sin utilizar las manos. Esto fue llamado fregona. Algo a lo que después siguieron otros elementos de limpieza similares entre los que destacaba la mopa.
Esto supuso una revolución en el mundo de la limpieza, ya que hasta ese momento esta tarea se realizaba poniéndose de rodillas, algo que a la larga resultaba realmente perjudicial para la salud.
Una de las principales diferencias entre mopa y fregona es que habitualmente se emplean con fines distintos.
Mientras que la primera se usa para eliminar la suciedad que está seca y suelta, la segunda es más para acabar con las manchas del suelo, ya que son totalmente aptas para mojarse (es más, en seco resultan realmente incómodas de usar).
En otras palabras, una es el complemento perfecto de la otra. Entre tantas opciones como hay para elegir, lo ideal para ambas alternativas es la microfibra, puesto que puede lavarse muy fácilmente, por lo que enseguida estarán listas para volver a ser usadas. Además, es un material ligero que es perfecto para quitar la suciedad de la manera más efectiva.
Las mopas tienen la ventaja de ser realmente versátiles. Con ellas, pueden limpiarse sin problemas laminados, baldosas, suelos de madera y vinilos. También son perfectas para acabar con la suciedad de techos y paredes.
No solo existen las mopas que se usan en el ámbito doméstico. Además, están las mopas industriales. Y es que evidentemente también es fundamental una correcta higiene para que cualquier empresa o negocio esté en perfectas condiciones.
No debemos olvidar que un ambiente libre de suciedad puede marcar una gran diferencia tanto a la hora de transmitir una buena imagen, como para conseguir que las personas que trabajen y acudan allí estén cómodas y sin problemas.
Esta clase de mopas enfocadas en estas superficies más grandes logran en una sola pasada que todo esté libre de polvo y manchas y totalmente resplandeciente.
En este caso, lo mejor son las mopas planas industriales de algodón hechas con hilos 100 % de algodón torcido, pues este es un material realmente resistente y muy sencillo de lavar. Algo muy importante cuando va a tener que ser usado tan frecuentemente y en superficies de estas dimensiones.
Su mango y bastidor hacen que todo el proceso sea fluido y rápido. Existen diferentes tamaños en función de las dimensiones de la superficie en la que se va a utilizar.
Si hablamos de su composición, podemos destacar dos tipos:
Mopas de algodón. Son las más habituales para uso industrial. Resultan realmente suaves y se adaptan a toda clase de suelos. Para conseguir un acabado más duradero y profesional, lo mejor es humedecerlas un poco con su producto de limpieza correspondiente.
Mopas de microfibra. Las mopas de microfibra son perfectas para quitar el polvo de cualquier superficie (son aptas para todas) o suelo con una sola pasada. Hay algunos productos de limpieza atrapapolvo específicos para mopas de microfibra con los que se pueden humedecer. Eso sí, es muy importante consultar antes si el tipo de microfibra lo permite.
Adquirir estas mopas además no podría ser más sencillo. Puedes hacerlo cómodamente por internet a través de páginas web como Clim profesional, que te las harán llegar rápidamente donde les digas y en las que además pueden encontrarse una gran variedad de opciones.
No hay duda de que en las mopas tenemos unas grandes aliadas a la hora de realizar la limpieza de nuestros hogares o negocios.
Entre otras cosas, proporcionan de forma rápida y sencilla un ambiente limpio y con una calidad de aire mayor, algo sumamente importante a la hora de conseguir un entorno saludable.