5 de marzo de 2024
En todo el mundo, la cocina vasca posee una reputación impresionante, no solo por la calidad de los platillos que ofrece, sino por las costumbres y tradiciones propias de su gastronomía, los ingredientes utilizados, y mucho más.
En pleno centro de Madrid, el restaurante Órdago es uno de los referentes de la cocina vasca en Madrid, que durante varias décadas ha logrado llevar la esencia de esta gastronomía a los vecinos y visitantes de la ciudad.
En plena temporada de alubias de Tolosa, la casa ofrece uno de sus platos de cuchara más selectos.
Las alubias de Tolosa son una variedad de alubias, que presentan un característico color negro y una piel muy fina. Esta leguminosa no tiene una gran producción, llegando apenas a unos 40.000 kg con el sello oficial de calidad Eusko Label, y otros 20.000 kg sin certificar.
De Tolosa, uno de los principales epicentros de producción y el que le ha dado el nombre, se ha empezado a conocer un plato que en los últimos años ha ganado popularidad en España por su exquisito sabor. Actualmente, continúa la temporada de alubias de Tolosa, y la oportunidad perfecta de disfrutar de esta comida. Este es uno de los platos principales y favoritos que se preparan en la cocina de Órdago, siguiendo la misma receta y preparación que ha acompañado al restaurante desde su fundación.
Resulta curioso que el sabor y la exquisitez de las alubias hacen que no se requiera añadir verduras o aliños para su cocción, sino que basta con un toque de sal para obtener un delicioso plato.
Hace más de 40 años, dos apasionados por la gastronomía vasca decidieron poner en marcha un proyecto que pronto se materializaría como un referente de la cocina vasca en Madrid. En 1980 Xabier Rodríguez y Elena Amesti abrieron las puertas del restaurante Órdago, en un pequeño local en el que apenas contaban con 6 mesas para sus comensales. En aquel entonces no ofrecían una carta muy amplia, pero la alta calidad de sus platos y su suculento sabor fueron el anzuelo que atrapó la atención de muchos, llegando a tener gran aceptación y una cantidad de clientes cada vez más grande.
Hoy en día, el restaurante es dirigido por la segunda generación de la familia, y ofrece una carta de temporada con platos vascos deliciosos que cuentan con el toque exclusivo de Andoni, su chef y propietario.
En el local de Órdago los comensales se sienten como en casa, mientras disfrutan de una magnífica comida y del trato cercano que le ofrece su personal y que genera un ambiente acogedor, tranquilo e ideal para comer y pasar un tiempo agradable. Y por cierto, es muy recomendable reserva previa porque suele estar completo.