30 de septiembre de 2024
La pintura es una técnica que, además de fortalecer la concentración y ampliar la percepción sobre el mundo, ayuda a liberar tensiones, conectarse con las emociones y fortalecer las relaciones interpersonales. Es por esto que el artista Jean Dahrieh, fundador de Art & Wine decidió abrir las puertas de su taller en Barcelona, para enseñar a la gente a pintar un cuadro desde cero por medio de sus sesiones de arte y vino. Para este artista, la pintura puede ser más que un lenguaje plástico y por tal motivo se empeña en enseñar a las personas un poco de la magia que trae consigo el quehacer pictórico.
Anteriormente, la figura del pintor se pensaba desde un taller solitario o sentado sobre la hierba, pintando lo que veía y ensimismado en sus pensamientos. Sin embargo, para Dahrieh, la pintura ya no es una actividad que se hace en soledad, sino que puede ser un plan que puede realizarse en grupo.
Las acciones físicas y mentales que intervienen en el acto de pintar son capaces de detonar intercambios que fortalecen las amistades, las relaciones de pareja o permiten entablar nuevas conversaciones con otros desconocidos. Encontrar un interés común es el primer paso para consolidar una comunidad y, por este motivo, Art & Wine se ha propuesto utilizar la pintura como vehículo para fortalecer las relaciones afectivas, a la par que promueve una actividad que ayuda a mejorar la salud emocional de las personas.
Las sesiones de arte y vino están hechas para que en una o dos horas los participantes elaboren una pintura sobre lienzo mientras disfrutan de un par de copas de vino y comparten con sus amigos, familiares u otros interesados por el arte. No es necesario tener conocimientos básicos sobre pintura para tomar el taller, ya que más allá del resultado, las sesiones de arte y vino se enfocan en potenciar las dinámicas que surgen durante el proceso.
Los encuentros de pintura pueden realizarse en grupo o en solitario, dependiendo del interés y las expectativas que tengan las personas al asistir a esta práctica libre. Jean Dahrieh, además, acompaña a los participantes durante toda la jornada, con el objetivo de resolver sus dudas y brindar las directrices generales para preparar el lienzo y elaborar la pintura.
Con estas clases, Art & Wine espera incentivar el talento innato y la pasión de las personas por la imagen, aprovechando el poder sanador del arte para fortalecer las relaciones interpersonales y contribuir a la disminución del estrés adquirido durante el día. Para Jean Dahrieh, es muy satisfactorio compartir parte de su práctica con otras personas, sobre todo si lo hace al calor de una buena conversación y de una copa de vino.