7 de noviembre de 2025
La evolución del modelo energético ha abierto nuevas posibilidades para gestionar de forma más eficiente y participativa los recursos disponibles. En este escenario, las comunidades energéticas han adquirido un papel destacado como fórmula colaborativa para generar, consumir y compartir electricidad renovable a nivel local.
Instalaciones Porcuna, empresa especializada en soluciones solares, promueve esta transición facilitando el diseño, legalización y mantenimiento de instalaciones colectivas adaptadas a las necesidades de vecinos, empresas o administraciones públicas.
Cada mes, el importe de muchas facturas eléctricas aumenta, sin que necesariamente se haya incrementado el consumo energético. Esto responde, en parte, al funcionamiento estructural del sistema, en el que se abonan costes por energía que, en determinados casos, podría estar siendo generada de forma local. Además, una parte de la electricidad producida se pierde durante su transporte por la red, lo que añade ineficiencias al modelo actual.
Durante años, se asumió que no existían alternativas a esta dinámica. Sin embargo, el avance de las comunidades energéticas ha demostrado que sí las hay. Estas iniciativas permiten a grupos de personas, pymes o entidades públicas unirse legalmente para generar y compartir su propia energía renovable.
La electricidad del sol o del viento se produce en el entorno próximo, se reparte entre los miembros y se aprovecha en beneficio colectivo. En este modelo, cada kilovatio generado contribuye no solo al ahorro individual, sino también al fortalecimiento de la comunidad.
El planteamiento de fondo es claro: en las comunidades energéticas, la energía deja de concebirse exclusivamente como un producto comercializado y pasa a gestionarse como un recurso compartido. Se trata de una nueva forma de entender la energía, más próxima, accesible y orientada al bien común.
Instalaciones Porcuna pone al servicio de estos proyectos su experiencia técnica en ingeniería solar, desde la fase de estudio inicial hasta la ejecución de la instalación, su financiación y posterior mantenimiento. También se encarga de la tramitación de ayudas y licencias, asegurando que el proceso sea ágil y viable para cualquier colectivo.
En 2024 se contabilizaron en España 659 comunidades energéticas, un 44 % más que el año anterior. Este crecimiento refleja un cambio de mentalidad que asocia sostenibilidad, autonomía energética y desarrollo local. A su vez, los programas públicos de apoyo y las oficinas de transformación comunitaria han sido determinantes para facilitar su constitución y ejecución.
Los beneficios de estas iniciativas son diversos: reducción de costes energéticos, aprovechamiento de recursos renovables, dinamización económica y refuerzo del tejido social. Para Instalaciones Porcuna, la clave está en acompañar este cambio con soluciones técnicas que lo hagan posible. Porque, en muchos casos, la solución energética no está lejos: está en el tejado.