Redacción - 14 de agosto de 2018
El Camino de Santiago pasa por ser la peregrinación católica más importante del mundo. Iniciada en el siglo IX por Alfonso II el Casto, considerado el primer peregrino de la historia, este hecho cultural es una de las máximas expresiones de identidad europea que existen en la actualidad.
Durante la Edad Media, el Camino de Santiago se popularizó y esta peregrinación de corte religioso sirvió para mucho más que profesar los respetos al Apóstol Santiago, quien según la leyenda está enterrado en la capital gallega. Durante varios siglos, los caminos a Santiago fueron siendo la excusa perfecta de crear ciudades y territorios, que fueron creciendo en parte para alojar a los peregrinos que iban en camino del encuentro con el Santo.
La propia Santiago de Compostela es una ciudad creada para tal efecto, acoger peregrinos. Hablamos de una ciudad que refleja en la Plaza del Obradoiro, donde se encuentra su Catedral, el poder absoluto de la Iglesia Católica en este lugar, con la inmensa Catedral mostrándose como edificio más imponente.
Durante siglos, Santiago incluso rivalizó con Roma por convertirse en la capital de la Cristiandad, al fin y al cabo, ambas guardan los restos de uno de los apóstoles de Jesucristo.
Aunque la cultura peregrina es más constante en el norte de España, donde decenas de pueblos y ciudades prácticamente se mantienen en pie por la llegada de peregrinos, en toda España y Europa el Camino pisa con fuerza, y una muestra son sus continuas expresiones tanto en el arte como en la música.
Una de las ciudades del sur de España que mejor muestra la importancia del Camino de Santiago es Sevilla. Santiago de Compostela y Sevilla son dos lugares en donde el Cristianismo ha sido y sigue siendo sus expresiones culturales más importantes. Una muesta de ello son las numerosas cofradías y hermandades que procesionan cada año en Semana Santa, algunas de ellas vinculadas al Apóstol.
Sevilla, con uno de los centros históricos más grandes de Europa, está plagada de iglesias, y una de sus fiestas más importantes, la Velá de Santiago y Santa Ana, las fiestas de Triana, tienen lugar en honor al Apóstol cada año a finales del mes de julio.
Son numerosas las representaciones del Santo en las iglesias sevillanas, ya sea solo o acompañado del resto de los apóstoles: en la puerta de la Asunción, en el altar mayor de la Catedral, las iglesias de la Magdalena o San Román, San Luis... En todas estas representaciones, el Santo es representado como apóstol, como peregrino o como soldado a caballo luchando contra los infieles.
La tradición por la pintura está muy presente en Sevilla desde hace siglos. Cuenta con una de las facultades de Bellas Artes más importantes del país y está emplazada en un antiguo convento en un precioso edificio en el centro de la ciudad. En Arte Dovale, una tienda de bellas artes en Sevilla encontramos material de bellas artes en Sevilla para iniciarse en esta forma de arte y, ¿por qué no? Representar al Santo y que luzca en algún museo o galería de arte.
La importancia de Santiago y el camino no finaliza aquí, pues en Sevilla se localiza la parroquia de Santiago, en el barrio de Santa Catalina. Es una de las iglesias más antiguas de la ciudad y según cuenta la leyenda, en este lugar estuvo la casa en la que se hospedó el Santo durante su estancia en Sevilla.
En esta iglesia hay varios cuadros del Apóstol en varias facetas de su vida. Sin embargo, la representación más destacable del Santo en Sevilla es un cuadro de José de Ribera que se expone de manera permanente en el Museo de Bellas Artes de la ciudad.
Sevilla es también el inicio de la Peregrinación a Santiago siguiendo el camino de la Vía de la Plata. Esta ruta, que discurre por ciudades como Mérida, Cáceres, Plasencia, Salamanca, Zamora y León... acaba finalmente en otros caminos, el del Salvador, el camino del Norte o el camino Primitivo, para finalmente llegar hasta Santiago.
Como ya han hecho millones de personas y siguen haciendo cada año. Hacer el Camino de Santiago para enriquecernos del arte y la cultura de España es cada vez más un propósito que se propone mucha gente para conocer más sobre su país, su cultura, las tradiciones y para superarse a sí mismos, el Camino de Santiago establece cada año récords de peregrinos.
Uno de los motivos más repetidos para realizar el Camino de Santiago es disfrutar de hermosos paisajes. Durante las muchas horas de camino que los peregrinos deben recorrer a pie, en bicicleta o a caballo hay tiempo para conocerse a uno mismo y disfrutar de paisajes y estampas sacadas de postal.
En muchos casos, estas imágenes quedan grabadas en la memoria de los peregrinos, y el mejor modo de inmortalizar esos recuerdos es a través de cuadros decorativos. En ArtFurniet encontramos una amplia variedad de Cuadros Modernos y cuadros abstractos. Son cuadros decorativos modernos con los que vestir paredes y rememorar las vivencias del camino.
Aunque la pintura, la escultura y la arquitectura son las formas de arte que mejor representan la influencia del Camino de Santiago en la sociedad europea y occidental en general, también la música ocupa un papel importante.
Desde los cantos gregorianos habituales durante la Edad Media hasta los coros de las iglesias santiaguinas pasando por las tradicionales bandas de gaitas del norte de España o la propia música que cada peregrino escucha durante su camino.
Hacer el camino a través de la música es una forma más de peregrinar. En las muchas fiestas en honor a Santiago la música juega un papel fundamental, junto con la gastronomía, y son típicas las orquestas y grupos musicales que amenizan estas veladas.
La importancia de la música y, en particular, los instrumentos musicales es tal, que son ya varias empresas las que ofrecen seguro para instrumentos musicales. Es una práctica cada vez más común asegurar un instrumento y que así el músico se sienta más seguro sobre su instrumento de trabajo. Una de estas empresas es Art Insurance, que ofrece la posiblidad de contratar un seguro para un instrumento musical.
Con más de 1.000 años de historia, la peregrinación a Santiago es uno de los hechos culturales más importantes de la sociedad española y europea, un eje vertebrador del territorio que ha sabido evolucionar y adaptarse a los tiempos venideros como ejemplo de éxito.
