16 de agosto de 2018
Las finanzas son una rama importante de la economía que estudia el intercambio de capital entre individuos, empresa o Estados, y e l riesgo que estas actividades conllevan. En otras palabras, es la ciencia que estudia cómo administrar el dinero. Existen finanzas personales, finanzas empresariales y finanzas estatales, es decir, el dinero y su tratamiento tiene un comportamiento diferente atendiendo al nivel de relevancia de la organización o administración.
Resulta clave para cualquier persona aprender sobre economía y finanzas desde la más tierna infancia, pues el dinero es el mecanismo que hemos inventado los humanos para intercambiar bienes y servicios. En el mundo en el que vivimos, el dinero sufre constantementes fluctuaciones que hacen que unos territorios o unas empresas sean más ricos que otros.
Las finanzas no son solo un tema de aprendizaje, sino de aplicación, todos necesitamos conocerlo para aplicarlo de manera personal y laboral, puesto que todas las personas hacemos uso de dinero y administramos nuestro capital.
La problemática financiera en hogares y empresas es consecuencia de no disponer de suficientes hábitos para administrar el dinero, de ahí que constantemente se piense que disponer de ingresos más altos sea la solución para evitar apuros financieros. Sin embargo, la realidad es que la verdadera clave está en administrar de manera correcta el total de ingresos entrantes.
Para los expertos en estas cuestiones, hablar sobre mercados financieros, intercambio de divisas, forex, divisas digitales... puede resultar muy conocido, pero para aquellos que no manejan conceptos financieros en su día a día, resulta fundamental comenzar a familiarizarse con estas ideas.
Entre los mercados financieros, el mercado forex es el más conocido de todos y el que mayor cantidad de dinero mueve en todo el mundo. Con la facilidad de acceso a la información que ha supuesto internet, son cada vez más los que se animan a interesarse por el trading de forex e intercambiar divisas.
Son muchas las plataformas en internet que ofrecen la posibilidad de iniciarse en este tipo de actividades de manera virtual, es decir, sin tener que invertir ninguna cantidad de dinero o capital. Las llamadas cuentas demo forex actúan simulando los mercados reales pero donde se realizan operaciones virtuales, donde no se pone en riesgo el capital propio, y de este modo el inversor comienza a familiarizarse con los mecanismos de acción de estos mercados.
Estas cuentas tienen una duración de entre unas semanas y unos meses, y pasado este tiempo, es cuando ya se empieza a operar con capital real. El mercado forex consiste básicamente en intercambiar divisas de curso legal para aprovechar la mejora o pérdida de valor de las mismas y conseguir beneficios mediante estos intercambios.
Se trata del mercado financiero más grande del mundo y mueve aproximadamente unos cinco billones de dólares diarios, más que todos los mercados bursátiles del mundo combinados.
Si bien el mercado forex puede ser una tentación para personas que dispongan de cierta liquidez y quieran obtener activos a partir de su capital, para logar mejor rendimiento económico, este tipo de operaciones no son recomendables para personas que no tienen un cierto conocimiento sobre economía y finanzas.
Un buen modo de conocer más sobre finanzas, concretamente sobre finanzas cuantitativas es interesarse por el master en banca y finanzas cuantitativas que ofrece la Universidad de Alcalá. Se trata de un máster en ingeniería financiera que tiene como objetivos formar a profesionales para que se desempeñen en tareas de tesorería y riesgos, principalmente en ambientes empresariales. Este máster en finanzas cuantitativas está dirigido principalmente a profesionales que ya tienen cierto dominio de conocimientos financieros.
El mercado forex atrae cada vez a más gente, pues es una forma aparentemente fácil de conseguir ingresos extra y aumentar el total de ingresos y el capital. Otra actividad que se está popularizando en los últimos años son las divisas digitales. Criptomonedas como el Bitcoin, el Ethereum, el Litecoin y otras muchas parecen ser la solución para muchos intercambios monetarios en el futuro, especialmente para aquellos países con una economía con alta inflación y muy dependiente del dólar.
La pregunta no es baladí. Son muchas las personas que tienen problemas para manejar su economía doméstica o empresarial. Para hacer frente a ciertos problemas de liquidez acuden en ocasiones a los denominados mini prestamos. Se trata de una opción de acceder a cantidades de dinero de manera rápida que resultan muy interesantes cuando se necesita dinero al momento por determinados problemas de liquidez. Los préstamos online se han puesto muy de moda en los últimos años, hasta el punto de que en este último año han aparecido decenas de nuevas plataformas prestamistas.
Estos créditos rápidos son, en muchos casos, la única posiblidad de acceder a préstamos rápidos para algunos inversores o familias, especialmente aquellos que por alguna razón están incluidos en un fichero de morosos. Las entidades prestamistas ofrecen esta ayuda económica prácticamente sin necesidad de trámites administrativos de ningún tipo o aval financiero. En muchos casos, otorgan incluso préstamos con ASNEF.
El funcionamiento de esta herramienta de financiación es sencillo, basta con solicitar el préstamos y la entidad prestamista tras una rápida comprobación del caso, acepta en la mayoría de los casos esta solicitud, enviando el dinero en cuestión de horas e incluso de minutos.
Los expertos en economía advierten de los posibles problemas de los préstamos rápidos, si bien aclaran que pueden ser útiles para hacer frente a algún problema de liquidez inmediato, no aconsejan convertir esta herramienta en una actividad de uso continuado.
El problema radica en el elevado interés de devolución, que se multiplica cuando el cliente es incapaz de hacer frente al préstamo. Atendiendo a esta consigna, esta fórmula de financiación puede resultar útil únicamente para hacer frente a problemas que necesiten una solución inmediata, y siempre que se tenga la constancia de que se va a poder devolver el dinero en el tiempo acordado con la entidad prestamista.