Redacción - 7 de febrero de 2019
Tras décadas de peticiones de colectivos ecologistas, por fin la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir va a cerrar 77 pozos ilegales situados en Lucena del Puerto (Huelva) que estaban matando a Doñana.
Joaquín Paéz, presidente de la Confederación ha detallado que el ente redoblará el control de los permisos de agua en esa zona donde los inspectores han encontrado una balsa ilegal y los 77 pozos ilegales que el Ayuntamiento de Lucena deberá sellar.
Si el consistorio no lo hace, la Guardia Civil y la Confederación procederán a su sellado para una posterior solución judicial de quién debe pagar los gastos.
Los pozos estuvieron drenando durante lustros los acuíferos vitales del Parque Nacional y Natural, que es además Patrimonio de la Humanidad.
Para regar campos de la zona y ante la inacción política la reserva natural ha ido muriendo por la falta de agua.
La junta de la Confederación va a declarar por primera vez que las masas de agua de Rocina, Almonte y Marismas no alcanza un buen estado.
Es la primera vez que se actúa de forma clara ante la sobreexplotación de los acuíferos de este organismo que depende del Gobierno de España.
A partir de ahora la CHG será mucho más rigurosa a la hora de otorgar concesiones de agua a los regantes según han afirmado a EL MUNDO.
