24 de septiembre de 2023
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Todo lo que deseamos es que un niño sonría

Todo lo que deseamos es que un niño sonría

Redacción - 25 de febrero de 2019

Llegamos a una edad en las que nos convertimos, inevitablemente, en padres, tíos, abuelos… y entendemos que pocas cosas nos hacen más felices que las risas de esos niños que consideramos nuestros, los más cercanos, familiares y queridos. Crecemos en ellos y disfrutamos de sus momentos de felicidad, todo lo que hacemos para sacarles una sonrisa nos parece poco y por eso nos pensamos tanto los regalos que les podemos ofrecer.

Nos lo pensamos aún más cuando estamos ante evento importante en sus vidas, es entonces cuando queremos acertar realmente con regalos originales que marquen la diferencia con el resto y los guarden con cariño, que no pasen a formar parte del montón de regalos que duran a penas unos días. Por otra parte, para eventos tan extraordinarios como los celebrados por la comunidad católica, los Regalos para un bautizo y para una comunión adquieren otra dimensión, pues son momentos de incalculable valor, inolvidables y que marcarán el resto de sus vidas.

Así mismo, para estos días tan especiales, es habitual que el protagonista también tenga un detalle, que ofrezca regalos para invitados a un bautizo o para una comunión e incluso para la boda, cualquier pequeño detalle para que los asistentes al evento se lleven un recuerdo físico a sus casas que les haga recordar este momento cuando el tiempo pase.

El ofrecer un regalo por parte del protagonista también hace aparecer la sonrisa en los niños, pues dar también procura felicidad, y al final lo que queremos es que nuestros niños sonrían, que no lo pasen nunca mal, y que de sus días especiales mantengan en el tiempo un grato recuerdo que vuelva a sacarles esa dulce sonrisa que es y será nuestra alegría.

Cómo acertar en la pubertad y en la adolescencia

Cuando son pequeños, con un poco de imaginación, fácilmente podemos hacerlos felices. Pero, este tema se vuelve más complicado cuando nuestros niños y niñas crecen y llegan a la pubertad o a la primera adolescencia, cuando alcanzan la edad de los 10 a 14 años, periodo en el que sufren unos cambios físicos, emocionales y mentales con una rapidez asombrosa, tanto que ni ellos ni nosotros somos capaces de controlar y entender.

La relación se vuelve cuesta arriba, los chicos acostumbran a estar siempre de mal genio, necesitan de la soledad y no entienden el cuerpo que están ocupando, lo que les vuelve inseguros, esquivos, intransigentes, difíciles de tratar y de acertar con lo que quieren o les molesta.

El único sitio donde parece que se encuentran cómodos es rodeados de aquellos que los consideran iguales, los amigos se vuelven la nueva familia, alejándolos aún más si cabe de sus verdaderos familiares, que se ven impotentes ante las decisiones que toman.

Los consejos ante esta situación, que inevitablemente se dará en nuestros hijos, no es otro que el de la paciencia, intentar acercarse a ellos con comprensión, elogiando sinceramente las acciones que acometen y compartiendo sus gustos. Por ejemplo, es algo muy habitual que les fascinen las figuras anime, por lo tanto, sería muy positivo llevarlos, acompañarlos o visitar con ellos una Tienda Anime Online, que nos expliquen qué es esto, y comprar algún merchandising anime que sea de su elección.

Aunque, en casos excepcionales, nos podemos encontrar con que el adolescente se aísle más de lo habitual, que sea imposible acceder a él, que cometa algún tipo de exceso, como desobedecer, malas conductas, fracaso escolar, trastornos en el aprendizaje, que sufra o sea causante de bullying en la escuela, … Causas más que suficientes para que pensemos en un tratamiento psicológico para niños en los casos más extremos.

Es una decisión complicada determinar cuándo debemos acudir a un psicólogo clínico para niños. Por regla general, cuando vemos conductas preocupantes en nuestros hijos, el primer paso antes de acudir a un psicólogo para adolescentes es conversar con nuestra pareja, familiares y con la escuela para saber si nuestras apreciaciones son compartidas con el entorno del muchacho. Es posible que los familiares recuerden un pariente que actuaba de forma parecida o que los maestros hayan visto situaciones con los demás alumnos que le hayan empujado a actuar de esta manera.

Pero no debemos dudar en acudir a estos especialistas cuando el comportamiento del niño se aleja demasiado de lo que debe ser una conducta normal de los chicos de su edad, con sus enfados, rabietas y soledades habituales. Si comprobamos que tiene cambios repentinos de humor, que está excesivamente irritable, apático, asustado o triste, debemos observar su comportamiento en grupo, con otros niños, si no tiene amigos o es demasiado tímido. En casa, tenemos que prestar atención a si tiene miedo a estar solo, tiene pesadillas o no logra dormir, si presenta tics exagerados, obsesiones, dolores de cabeza, vómitos, nervios…

Todo influye en la personalidad del niño

Los expertos aseguran que en la conducta del niño influye incluso los meses de gestación en el vientre de la madre, el tipo de parto, e incluso el nombre que se decida ponerle. En este sentido, podemos hacerle un flaco favor si le ponemos un nombre impronunciable, aunque sea el del protagonista de nuestra serie o libro favorito.

Está demostrado, según numerosos estudios, que el nombre cuanto más sencillo mejor para el niño, Si además tiene un significado positivo, pero que no lo marque en exceso, podrá desarrollar una personalidad propia sin demasiados elementos externos que lo alteren.

Así, en estos momentos, Zaid es uno de los nombres más populares y que cumple con estas reglas básicas, de brevedad y fácil pronunciación. Si quieres saber el significado de Zaid o el significado de los nombres que tengas en mente ponerles a tus hijos y no quieres errar, haz clic sobre el enlace que hemos referenciado en este párrafo y elige con conocimiento de causa.

En cualquier caso, debemos ser conscientes de que lo que más afecta al desarrollo psicológico de un niño es el entorno afectivo familiar, que exista buena o mala relación entre sus principales allegados será fundamental para que el pequeño tenga la suficiente confianza en el entorno para poder desarrollarse con normalidad.

Una adecuada relación con los padres, fundamentalmente, le permitirá comprender y asimilar correctamente el significado de las emociones y aplicarlas a los demás seres vivos que conforman su entorno. Por lo tanto, y en sentido opuesto, si el chico o chica vive malas actitudes, en las separaciones, malos tratos, trastornos psicológicos en sus progenitores… existirá mayores posibilidades de padecer y sufrir dificultades psicológicas durante su infancia y adolescencia, e incluso en su posterior etapa adulta.