Redacción - 16 de mayo de 2019
Un total de 71 ex peces gordos de la Junta de la época de Susana Díaz están cobrando cesantías tras la llegada del gobierno de derechas que cuenta con el apoyo de la ultraderecha.
Estos ex altos caros siguen cobrando su sueldo íntegro durante dos años, en el caso de los ex consejeros, y un año el resto de peces gordos.
Esto constituye un privilegio claro y un trato muy diferente respecto a los trabajadores andaluces. Las cesantías y otros privilegios fueron denunciados por Teresa Rodríguez, líder de Adelante Andalucía, en el Parlamento andaluz.
Este chollo se implantó en 2005 en un batiburrillo de leyes que se llamaron “de impulso democrático” como recuerda EL MUNDO.
El diario publica que gracias a este “impulso democrático”, los 109 diputados y los peces gordos de la Junta con rango de director general o superior están blindados con estas polémicas indemnizaciones ya que curiosamente no pueden cobrar el desempleo normal y que se supone que tendrán problemas para recolocarse en el sector privado o público por el régimen de incompatibilidades.
El ex pez gordo que menos cobra se lleva 4.400 euros al mes y el que más 5.800 como detalla EL MUNDO.
Por ejemplo, Adelaida de la Calle, ex consejera de Educación, solo ha estado dos años en ese cargo pero podrá cobrar otros dos años más, un total de 123.424,08 euros.
Cada mes se pagan 364.905,42 euros del dinero de los andaluces en pagar las cesantías de 71 peces gordos de la etapa de Susana Díaz.
Ella misma tiene derecho a la cesantía además de vicepresidentes, consejeros, viceconsejeros, secretarios generales, secretarías generales técnicas y direcciones generales. Junto a ellos están también los titulares de los centros directivos de los servicios centrales de las agencias administrativas y agencias de régimen especial; y los titulares de las delegaciones del gobierno de la Junta. En total, 141 peces gordos.
Como ejemplo de ex alto cargo que no quiso ese privilegio citamos a Antonio Maíllo, líder andaluz de IU y portavoz de Adelante Andalucía, que renunció a dicha cesantía a la que tenía derecho como ex director general de Administración Local.
Susana Díaz acusó en su día a Podemos Andalucía de «desacreditar» el sistema democrático por pedir el fin de los privilegios que tenían respecto a los andaluces tanto los parlamentarios como los peces gordos de la Junta controlada entonces por la organización PSOE-A. La lideresa y ex presidenta de la Junta, de hecho se negó a contestar a la pregunta de Teresa Rodríguez de si iba a pedir a los parlamentarios del PSOE-A que prescindieran de sus "privilegios".
Por su parte, PP y C's, se alinearon con Susana Díaz a la hora de defender estos "privilegios" y sus diputados votaron junto a los del PSOE-A para subirse el sueldo.
