Miguel Ángel Olimpo - 21 de agosto de 2019
La fisioterapia puede ser usada para diagnosticar padecimientos, realizar tratamientos terapéuticos o ejecutar acciones preventivas. Esta ciencia abarca una serie de técnicas y trabaja en conjunto con otras áreas de la medicina.
Los métodos aplicados con la fisioterapia son especialmente diseñados para pacientes en proceso de recuperación, problemas de movilidad, lesiones o enfermedades. Las técnicas manuales o asistidas con instrumentos son una herramienta eficaz en la recuperación, sin la necesidad de tomar una gran cantidad de analgésicos.
Muchos de los ejercicios, tratamientos y métodos proporcionados por el fisioterapeuta en Málaga se encuentran dirigidos a mejorar y reeducar posturas del cuerpo, para impedir que ciertas enfermedades o molestias causen mayores dificultades a futuro como, por ejemplo, dolores de espalda por desviaciones de la columna.
La fisioterapia permite contrarrestar los síntomas de algunas afecciones, al ayudar a disminuir inflamaciones y dolores articulares y musculares. También es excelente para detener las consecuencias de enfermedades degenerativas.
Los métodos neurológicos son eficaces para tratamientos de enfermedades del sistema nervioso, y la fisioterapia respiratoria ayuda en los padecimientos degenerativos que causan daños en el sistema respiratorio.
Puede incrementar la calidad de vida y bienestar general. Ayuda a fortalecer el organismo, las estructuras óseas, musculares y articulares, a la vez favorece la ampliación de la flexibilidad y la movilidad, por lo que permite reducir el riesgo de lesiones.
¿Por qué es recomendable una fisioterapia a domicilio?
La fisioterapia puede realizarse en diversos ambientes, y uno de los de mayor beneficio es el servicio de fisioterapeuta a domicilio al permitir que los pacientes convalecientes puedan recibir tratamientos sin desplazarse de su casa, para lo que necesitan en algunos casos un vehículo adaptado.
La fisioterapia se puede ajustar a las necesidades de la casa, brindando al paciente ejercicios de recuperación de capacidades, que pueda realizar en el entorno donde se encuentra habitualmente. Además, ayuda a tener un trato personalizado, teniendo tiempo en exclusividad del profesional.
Los pacientes con terapias a domicilio suelen responder bastante bien a los tratamientos, al cumplir de forma más completa con las pautas brindadas. Además, los recién operados pueden continuar con la atención que se inició en el hospital, lo que ayudará a una más rápida recuperación.
¿Cuáles son las técnicas usadas en la fisioterapia?
Existen muchos métodos que se emplean en tratamientos de fisioterapia, dentro de la terapia manual está la masoterapia en donde se ajustan modalidades de masaje deportivo, terapéutico, criomasaje o de tejido conjuntivo y la fisioterapia ortopédica para lesiones óseas y de músculos como hombros, cadera, rodillas, espalda o cuello.
Otro método manual es la kinesioterapia con movimientos pasivos y activos para partes del cuerpo, que ayudan especialmente a la movilidad articular. Con los estiramientos analíticos se permite incrementar el movimiento cuando existe acortamiento de tejido blando, siendo indicada en quemaduras, inmovilización prolongada, contracturas o cicatrices retráctiles.
La fisioterapia obstétrica fortalece el suelo pélvico por medio de ejercicios de miasténica hipopresiva. Con este método se previene, detecta y combaten lesiones de la musculatura de la pelvis, el periné y abdomen.
Algunos de los masajes que también pueden ofrecer los profesionales en fisioterapia son los linfáticos que sirven para reactivar el sistema linfático, para evitar problemas de hipertensión, acumulación de líquido y celulitis. También se realiza el masaje sueco para relajación articular y muscular, que ayuda al bienestar general al incrementar la eliminación de toxinas y permitir una óptima oxigenación de tejidos.
Además de las técnicas manuales para la reeducación de la postura y para tratar lesiones, se pueden realizar procedimientos con agentes físicos, como la ultrasonoterapia y la electroterapia con las cuales de aplica ultrasonido y corriente eléctrica en áreas del cuerpo.
También hay herramientas que usan el frío y el calor para dolores reumáticos como la crioterapia y la termoterapia. El agua es otro método eficaz, a través de la hidroterapia se pueden relajar músculos, disminuir la inflamación, dilatar vasos sanguíneos y eliminar dolores.
Los especialistas también saben cómo utilizar instrumentos y herramientas que permiten potenciar los beneficios de los ejercicios proporcionados. Para ello, primero evalúan cada caso de forma individual y luego del diagnóstico pueden indicar el mejor tratamiento para cada paciente.
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