Redacción - 11 de noviembre de 2020
Andalucía ha sumado 95 fallecidos por Covid-19 este martes y 2.845 nuevos casos. La comunidad supera la barrera de los 3.000 muertos por el coronavirus.
A su vez ayer entraron en vigor las nuevas restricciones en el territorio andaluz que establecen el cierre de las actividades no esenciales a partir de las 18.00 horas así como el adelanto del toque de queda. Además, la Junta de Andalucía gobernada por PP y Cs ha confesado que querían confinar Granada de forma domiciliaria pero que el Gobierno no se lo permite.
Juan Marín, todavía vicepresidente de la Junta de Andalucía, ha declarado a la cadena Cuatro este martes:
“Granada con las circunstancias que tiene debería estar en confinamiento domiciliario, pero el ministro de Sanidad, Salvador Illa, ha dicho claramente que no va a haber confinamiento domiciliario, a pesar de las circunstancias tan terribles. (…) Si por nosotros fuera, Granada tendría ya activado un confinamiento domiciliario”.
En su entrevista, recogida por Europa Press, ha reconocido la Junta no tiene la herramienta del confinamiento domiciliario porque “el Gobierna de España no la puso con el decreto para que las comunidades autónomas pudieran adoptar esas decisiones”.
Las críticas de la Junta al Gobierno contrastan con su propia tranquilidad a la hora de tomar medidas más drásticas en Granada, donde ha tardado varias semanas en decretar la clausura de toda actividad económica no esencial, teniendo en cuenta que desde mediados de octubre la situación epidemiológica era alarmante.
Cabe señalar que hace dos semanas los datos de infectados se habían disparado pero el gobierno de Juanma Moreno y Juan Marín se limitó a ordenar el cierre perimetral de la ciudad de Granada capital y su área metropolitana, cuando tenían una incidencia de contagios de más de 1.000 casos por 100.000 habitantes.
Por su parte, Patricia del Pozo, consejera de Cultura y Patrimonio Histórico, ha aclarado que las librerías son un sector esencial en toda Andalucía, y podrían estar abiertas más allá de las 18:00 horas, cuando se ha ordenado el cierre de toda actividad no esencial en la región por la crisis del coronavirus.
Ayer se supo que la Junta de Andalucía quería adelantar más el toque de queda pero el Gobierno tampoco se lo permitió.
