
3 de septiembre de 2025
Con el final del verano, muchas familias se preparan para el regreso a las aulas. La vuelta al cole no siempre resulta sencilla: madrugones, nuevas rutinas y cierta incertidumbre pueden generar nerviosismo tanto en los niños como en los padres. Para conocer cómo afrontar este momento de forma equilibrada, el colegio Green Stone, un colegio británico situado en la Colonia de Torrelodones (Madrid), comparte algunas recomendaciones basadas en su experiencia educativa. La propuesta pedagógica del centro incorpora la disciplina consciente como eje central para acompañar a la infancia, fomentando seguridad, confianza y bienestar en el aula y en casa.
“Anticiparse es clave”, explica Reem Oweida, jefa del departamento de Disciplina Consciente de Green Stone. “Recuperar poco a poco los horarios de sueño unos días antes del inicio de curso ayuda a que la transición sea más natural. También recomendamos organizar el material escolar con tiempo e implicar a los niños en esta preparación, para que se sientan partícipes de su propio proceso. Y en la primera semana, es importante dejar espacio al juego libre y a las actividades al aire libre, de modo que el equilibrio entre lo académico y lo personal sea más fácil de alcanzar”.
Desde Green Stone subrayan que el acompañamiento emocional es tan relevante como la organización práctica. “La disciplina consciente enseña que educar no es controlar, sino conectar”, señala Oweida. “En la vuelta al cole es útil establecer rituales de inicio del día, como un saludo especial o una respiración conjunta; usar un lenguaje positivo y descriptivo en lugar de órdenes; validar las emociones de los niños cuando expresan nervios o cansancio; y apoyarse en rutinas visuales que les ayuden a anticipar lo que va a ocurrir. Todo esto aporta seguridad y confianza”.
La filosofía educativa del colegio Green Stone de Torrelodones integra estas prácticas en su día a día, generando entornos donde la empatía y el respeto mutuo son pilares fundamentales. “El inicio de curso no es solo un regreso a la rutina académica”, concluye Oweida, “es también una oportunidad para reforzar la conexión entre familias, alumnos y docentes. Cuando los niños se sienten escuchados y comprendidos, afrontan con más serenidad los retos de septiembre y desarrollan todo su potencial en un entorno seguro”.
Más información en greenstoneinternationalschool.com