Digital Sevilla
10 de junio de 2022
Desarrollado por Bungie, Destiny 2 llega como la secuela del videojuego Destiny igualmente distribuido por Activision; combinando las características que definen a los títulos de acción y disparos en primera persona o shooter multijugador de corte online masivo (MMO) y elementos de RPG, consigue la fórmula adictiva perfecta.
Precisamente esta interesante mezcla de atributos, es la que despierta la atención de jugadores tanto de PC como de consolas PS4 y Xbox One, quienes se abocan a medir igualmente sus destrezas en lo que a clicks por segundo se refiere.
Dotando al jugador de nuevas armas y con habilidades repotenciadas, Destiny 2 lo traslada a la última ciudad que sucumbe ante los ataques de la Legión Roja comandada por Primus Ghaul. Combatir la fuerza invasora a través del Sistema Solar es el objetivo.
El argumento de Destiny 2, no admite críticas; el hilo de la historia de su predecesor conduce hasta un año después de los acontecimientos de la expansión, situando al jugador en lo que queda de la ciudadela atacada por parte de la región roja de los cabal.
Con el viajero encerrado –orbe que surte de poder a cada guardián– los héroes y su equipo, quedan indefensos; con los guardianes forzados a la huida, la meta se reduce a reunir a los líderes de la guardia, quienes al mando de la hechicera Ikora Rey, tendrán que recuperar los poderes y luchar contra las fuerzas oscuras.
Si bien conserva la esencia y gameplay que otorgó el éxito a su predecesor, esta secuela no se conforma con apostar por el juego cooperativo online y PvP, sino que agrega a su fórmula, innovadoras mecánicas de combate, nuevas habilidad y un sistema de clases mejorado
Adicional a las ya vistas clases Hechiceros, Titanes y Cazadores, Destiny 2 incorpora subclases de especial interés para los jugadores; Dawnblade, Sentinel y Arcstriker, son sus nombres y se distinguen por incorporar súper habilidades.
Asimismo, es modificado el sistema de armas y equipamiento, con un arsenal dividido y organizado en tres categorías: armas de poder, cinéticas y de energía, dejando en el pasado la división tradicional de armas primarias y secundarias.
