Miguel Ángel Olimpo - 10 de octubre de 2018
En la zona de Atocha, en Madrid, acuden todos los miércoles decenas y a veces cientos de personas, a la Iglesia de la Santa Cruz, a rezar y agradecer al santo que fue confundido con el traidor, Judas Iscariote, por favores y súplicas para solucionar casos desesperados y muy difíciles.
La devoción de los madrileños por el santo milagroso ha crecido considerablemente desde hace más de 30 años, según el párroco que ha sido testigo del creciente flujo de fieles que cada vez más veneran con muchísima fe y devoción al Santo milagroso y a su poderosa oración.
Según la historia, en las Revelaciones de Santa Brígida, la Santa narra que Nuestro Señor le sugirió que para conseguir solución a los casos difíciles y desesperados, le pidiera el favor al santo mediante la oracion San Judas para que se cumpliera su desesperada petición.
En los Estados Unidos es creciente la devoción a San Judas desde la Depresión de 1929, época en la que la mayoría de norteamericanos perdieron sus empleos y no tenían ningún sustento, ni nada para alimentarse.
Y en España se celebra en Madrid, en la iglesia Santa Cruz, donde cada miércoles acuden muchas personas a rezar para que mediante su intercesión, les cumpla sus casos difíciles o imposibles. Su fiesta se celebra el 28 de octubre, fecha especial donde todos los devotos le rezan con fervor, para que mejore su salud, les consiga un trabajo o los ayude en los estudios.
Cuando parece que todas las puertas se han cerrado, o las soluciones no aparecen en un horizonte oscuro y lúgubre sin atisbo de luz, hay que pedirle e invocarlo con muchísima fe, pues no abrirá una puerta, sino todas las puertas y ventanas que permiten el acceso del bienestar y la optimista esperanza.
También se recomienda ofrecer un agradecimiento, llamado por algunos: manda, que es un agradecimiento especial que puede consistir en donaciones de alimentos, flores, velas encendidas, dedicar un tiempo para trabajar en casas de caridad o asilos y donar ropa para indigentes o menesterosos.
Muchas personas que profesan su devoción, también expresan su agradecimiento montando un altar dentro de su hogar, que incluye una imagen o busto del santo, flores, velas y algunos artículos alusivos a él. También se acostumbra a encenderle una vela al mismo tiempo que se le reza su oración o novena.
La oración a San Judas Tadeo es considerada como una de las plegarias más poderosas y efectivas, cuando la persona se encuentra en una situación difícil y desesperada, cuando no consigue salida. El venerado santo, uno de los aprendices más devotos de Jesús e integrante del grupo de los apóstoles, era conocido como Judas de Santiago o Judas Tadeo. A través del tiempo ha sido obviada su santidad y carisma, al ser confundido con el apóstol que traicionó a Jesús: Judas Iscariote, conocido como el traidor de las 30 monedas, que entregó a Jesús a los esbirros romanos que lo crucificaron.
Es usual que se le vea representado con un mazo grueso de madera, pues según la leyenda con él fue martirizado y sufrió terribles suplicios. En otras ocasiones se le representa con una llama que flota sobre su cabeza, pues fue uno de los que asistió al Pentecostés, donde se dice que fue iluminado y bendecido por la Llama Divina del Señor.
San Judas Tadeo tiene una oración sencilla y corta para rezarle todos los días y en cualquier momento desesperado, donde no se encuentre una solución, donde se le alaba y se le pide que ruegue por el cumplimiento de la súplica en cuestión.
Por otra parte, también es posible hacer la petición mediante una novena que necesita un poco más de tiempo y dedicación para ejecutarla, pues necesita de nueve días y un tiempo de dedicación cada uno de ellos. Existen también oraciones para el dinero, para conseguir casa, para sanar a un enfermo, para lograr amor o regresar con la pareja, oración de agradecimiento general por los favores recibidos y una para obtener éxito en los negocios.
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