24 de abril de 2024
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La evolución del logo en España

La evolución del logo en España

Redacción - 23 de mayo de 2022

Aunque parezca un tema baladí, un logo es esencial en cualquier marca. No importa si hablamos de una empresa privada o pública, de una institución o de cualquier otro organismo. Tanto partidos políticos como el 24 horas de la esquina de tu barrio cuidan este aspecto, ya que un logo es como una marca de presentación, es el símbolo con el que los clientes y usuarios reconocerán la entidad. Por ello, crear un logo es importante. Pero ¿cómo ha sido la historia de los logos en España? ¿Qué evoluciones se presentan como las más interesantes? ¡Veámoslo!

Los logos en el fútbol, una lección de historia

Un análisis interesante respecto a la historia del logo en España lo podemos encontrar en sectores como el fútbol o la prensa. Eso sí, en el caso del deporte rey, se prefiere el término escudo, pues su cariz simbólico e identitario es mucho más poderoso. Respecto a los equipos andaluces más laureados, Betis y Sevilla, las historias son bastante interesantes:

  Betis: El actual escudo del Betis se basa en el original de 1931 (lo único que se ha hecho es modernizar trazos mediante pequeños cambios). Curiosamente, en ese momento presidía el club José Ignacio Mantecón, reconocido masón. Por eso, incluyó, entre otras referencias masónicas, el triángulo invertido (que evoca a la divinidad creadora: la mujer masona). La corona, como en otras entidades futbolísticas, hace referencia al título de realeza brindado por Alfonso XIII en 1914.

  Sevilla: El Sevilla F. C. es todavía más conservador en este sentido, pues salvo ciertas modernizaciones en el acabado, el escudo es prácticamente idéntico al que se presentó en 1922. Lo curioso de este es que incluye tres figuras capitales de la ciudad: San Isidoro, San Fernando y San Leandro, que simbolizan la conexión con esta. Las once barras blancas y rojas toman su origen en la bandera que ostentaba el rey Fernando III El Santo durante la toma de Sevilla en 1248.

A lo largo de la historia del logo en España, encontramos otros ejemplos futbolísticos interesantes. Hablamos del emblema del Mundial de Fútbol de 1982, cuyo nombre, Naranjito, ha quedado para la posteridad. Se trata de una imagen muy de la época que tal vez ahora se muestre obsoleta, pero deja clara su intención con un solo vistazo: una naranja, típica de España, vestida de corto con los colores del país y más que dispuesta a jugar al fútbol. ¿Qué mejor forma para que los aficionados entendiesen que el Mundial se disputaba en nuestro país?

El logo de Correos España: Una historia singular

Otros ejemplos atractivos de la historia del logo los encontramos en instituciones que a día de hoy, por comunes, pasamos por alto. Es el caso de Correos España. Curiosamente, este logo que creemos tan nuestro es compartido por otros países, al menos en su esencia. Increíble que se haya mantenido siglos, ya que su origen, en torno al S. XV, queda lejos del marketing digital actual, que hoy en día ayuda a propagar ideas con gran rapidez.

¿Pero cuál es su origen? La familia Tasso, que creó el primer servicio postal europeo. Sin embargo, el icono actual español para Correos es obra de José María Cruz Novillo a finales de los años 70. Tal fue su éxito, que poco se ha cambiado desde entonces. Asimismo, este diseñador es responsable de otros logos que poco tienen que ver con Correos, como el de la Cadena Cope, el periódico El Mundo o el partido político PSOE. Esto demuestra que la creatividad va más allá de cualquier ideología.

Los mejores logos acaban formando parte de la cultura popular

Estamos hablando de la identidad de marca, por lo que tiene que ser un logo original que, además, se incluya en muchos de tus productos (incluso con relación a los trabajadores, como bolígrafos o mascarillas personalizadas).

Un ejemplo de logo que ha traspasado fronteras en España es el de Chupa-Chups. Si todavía no lo sabías, sí: ¡estos caramelos universales son de origen español! Y tanto triunfó esta marca pionera, que por extensión se conoce como chupachups cualquier tipo de golosina de presentación similar. Además, el logo no lo diseñó un cualquiera, sino el gran Salvador Dalí. Corría el año 1968 y, desde entonces, la marca apenas ha tocado el logo, ya que su diseño atemporal no lo necesita.

Los usuarios de cualquier servicio o bien aprecian la consistencia, pues la asocian a la calidad y a la confianza. Un logo que se mantiene en el tiempo sin modificar, salvo modernizaciones necesarias, resulta mucho más atractivo para los usuarios. Y no solo porque genera un contexto de seguridad, sino porque, además, resulta más accesible (por ejemplo, a la hora de buscar sus productos si, sobre todo, esto involucra a terceros).

Ejemplo de ello lo encontramos en el logo de Cola Cao. Desde la creación de su logo, o más bien su tipografía manuscrita, en 1945, apenas se ha modificado. El rojo, azul y amarillo representativos de la compañía se han mantenido en el tiempo, junto a la misma fuente. Sí, el logo se ha modernizado algo con los años, ya que más de siete décadas dan para mucho. Sin embargo, la esencia se conserva, y no es una decisión gratuita.

Logo como símbolo central de una entidad

 Ya ha quedado claro que, independientemente del campo en el que se trabaje, un logo o símbolo es una parte fundamental de cualquier organismo, ya sea empresarial o meramente institucional. Este ayuda a crear una imagen original para desmarcarse de los competidores. Además, incluso permite incluir en él los valores u objetivos que la entidad procura representar. Por tanto, ¡generar un logo de calidad no es un asunto menor! Queden como ejemplo de ello las historias aquí recogidas.