Digital Sevilla
30 de noviembre de 2021
Las crisis económicas se han convertido, por desgracia, en uno de los sellos de identidad de lo que llevamos de siglo. A finales de la década pasada llegó la crisis inmobiliaria, que puso en tela de juicio la viabilidad económica de centenares de empresas en nuestro país. Ahora, más recientemente, estamos viviendo los estragos financieros provocados por la pandemia del coronavirus. Dos periodos verdaderamente complejos en los que determinados despachos de abogados, como ACPitiusos, han surgido en la defensa de quienes han visto su solvencia arrinconada contra las cuerdas. Un despacho que, con su CEO Fernando Mari Maso al cargo, ha ayudado a una gran cantidad de entidades a superar y esquivar toda clase de riesgos financieros.
El varapalo financiero del que estamos siendo testigos como consecuencia de la Covid-19 resulta verdaderamente preocupante. En la actualidad, multitud de negocios han tenido que cerrar sus puertas como consecuencia de la acumulación de deudas y, en aras de paliar esta situación, el despacho de abogados ACPitiusos se pone del lado de los damnificados en lo financiero. Un trabajo de rigor que se nutre de los recursos legales que buscan asentar las bases de solvencia durante los momentos más complicados.
En este orden de ideas, el equipo de ACPitiusos se ha especializado en el proceso del concurso de acreedores. Bajo el liderazgo del CEO Fernando Mari Maso, se encargan de, en caso de que la empresa no pueda asumir el pago de las facturas que va recibiendo, declarar como insolvente a la persona -sea particular o una figura jurídica-. Durante el concurso, se busca la manera de evitar la quiebra total del negocio, pudiendo escoger entre dos tipos de concursos diferentes: el requerido por el deudor, conocido como voluntario, o el necesario, que existe el acreedor. De este modo, se pospone el pago de las deudas contraídas durante el periodo de crisis financiera para encontrar las vías más satisfactorias para ambas partes, estipulando convenios que pasan por vía legal a través de este equipo de abogados.
En caso de que el pago de las deudas, una vez finalizado el concurso de acreedores, siga siendo inasumible, todavía queda un paso más antes de bajar para siempre la persiana de la empresa: la ley de segunda oportunidad. Con este resquicio, se renegocian las deudas con los acreedores y, si la situación lo permite, los abogados pueden llegar a cancelar por completo los pagos pendientes. Una última opción para salvar el negocio en el que tanto esfuerzo hemos depositado.
Si bien es cierto que estos dos servicios son la carta de presentación de ACPitiusos, cabe señalar que el despacho se ha especializado de igual manera en otras materias de interés. En este orden de ideas, es necesario hacer una mención directa a los servicios de “compliance” para empresas, los cuales están destinados a garantizar que la compañía queda sujeta a los márgenes legales correspondientes. Un aspecto esencial que influye de igual forma en la solvencia y la viabilidad del negocio, evitando potenciales desencuentros con las autoridades que deriven en multas complicadas de asumir.
Este sistema se encarga de gestionar adecuadamente todas las normas internas de la corporación, basándose en un plan de acción perfectamente organizado. Dicha labor está determinada por la normativa ISO 19600 de 2015 e ISO 37001 de 2016; así como la Norma UNE 19601, la cual determina que cualquier delito cometido dentro de la corporación puede derivar en responsabilidad penal a la empresa. Por lo tanto, no resulta extraño afirmar que se trata de uno de los trabajos más relevantes tanto para las grandes empresas como para las pymes; forjando una excelencia en las labores de contabilidad, producción, venta o de trámites fiscales.
Así pues, no podemos dejar de comentar los aspectos que van a determinar la excelencia en un plan de acción, tal y como es el caso de revisar los cambios normativos existentes, encontrar la forma de evitar riesgos penales, velar por el complimiento de la normativa o establecer controles de rigor sobre incidencias laborales. Una serie de pautas que mantienen la estabilidad de la empresa a corto y largo plazo, dejando de lado aquellas problemáticas que compliquen su situación financiera.
