Redacción - 25 de octubre de 2021
Hace más de una década surgió el Bitcoin, un activo digital desarrollado por Satoshi Nakamoto con el objetivo de hacer las veces de dinero digital para transacciones entre pares (P2P). Aunque aún no conozcamos la verdadera identidad de Nakatomo, ni si logró su cometido, lo cierto es que el Bitcoin habría crecido más allá de las expectativas de cualquiera.
Con un valor igual a cero, esta criptomoneda se utilizó por primera vez en el comercio para la compra de un par de pizzas. En la actualidad (con un valor que ya supera los $60.000), algunas empresas las estarían aceptando como método de pago para la compra de vehículos y viviendas. Y hace tan solo unos días, superó su valor máximo registrado a mediados de año.
Aunque su precio ha seguido tan volátil como siempre (siendo de $61,500 al momento de la redacción de esta nota), esta semana superó brevemente los $66,900, más de $3.000 por encima del pico máximo registrado en abril cuando llegó a cotizarse por poco más de $63.500. Sería, de lejos, la criptomoneda más valiosa del mercado.
Al igual que en ese momento, el precio cayó de forma brusca en tan solo un par de días, perdiendo cerca de $5.000 rápidamente. Si bien a primera vista parece algo negativo, la realidad es que plantea cuáles son las posibilidades a futuro: no solo es posible alcanzar el precio máximo, sino también superarlo con creces.
Puede que su precio parezca sumamente atractivo para los nuevos inversionistas, sin embargo, el Bitcoin no parece ser la mejor inversión en criptomonedas actualmente. El motivo es sencillo: sí, cuesta más de $60.000, pero sus variaciones son de entre 50% y 100% en los momentos de mayor crecimiento, mientras que otros activos han crecido más de 1.000% en el mismo periodo.
Esto lo hemos visto en casos como el de la criptomoneda meme Dogecoin, al igual que con altcoins como Solana y Cardano.
Su ventaja es que se trata de una de las criptomonedas más fáciles de obtener y utilizar, siendo no solo aceptada en muchos negocios de todo el mundo, sino estando disponible en casi cualquier plataforma de intercambio e inversión. Es posible comprarla y venderla a través de exchanges, así como invertir en productos derivados como los que ofrece Bitcoin Profit.
Al igual que cualquier activo de inversión, tiene ventajas y desventajas, sin embargo, no sería la mejor opción del mercado en la actualidad.
El futuro del Bitcoin sigue siendo tan difícil de predecir como lo ha sido hasta ahora ya que, al estar únicamente atado a la confianza de los inversionistas, así como a las grandes compras y ventas que hacen los inversionistas multimillonarios, es imposible determinar exactamente cuándo una variable externa pueda derrumbar el precio.
Muchos de los entusiastas afirman que el Bitcoin podría superar los $100.000 para finales del 2021, siendo incluso posible que alcance los $500.000 para mediados de la década. Aunque algunos detractores no piensan que llegue tan alto, sí aseguran que el crecimiento es una realidad, al menos por algunos años.
Otros especialistas en materia económica y financiera siguen afirmando que el Bitcoin no tiene ningún valor, y que su precio caerá hasta los $0 con el surgimiento de regulaciones estrictas.
No existe manera de asegurar cuál será el resultado final, sin embargo, algo es una realidad: el Bitcoin seguirá creciendo en los próximos meses, convirtiéndose en una de las inversiones más rentables de la actualidad. En conjunto con el resto de las criptomonedas, es una revolución para las finanzas digitales.
