Redacción - 17 de septiembre de 2018
Las autoridades españolas han expulsado a Marruecos a un hombre de 39 años que ejercía como imán en una comunidad islámica de Granada, debido a que difundía mensajes extremistas y violentos aprovechándose de su influyente papel entre los ciudadanos musulmanes que vivían en la provincia.
El ciudadano marroquí, que respondía a las siglas D.S., ejercía de imán de la Comunidad Islámica de La Rábita (Granada), donde siempre defendía un mensaje “muy extremista”. Apoyaba la no integración de los musulmanes en la sociedad española, según medios locales que resaltan el perfil cada vez más violento en sus discursos. En ellos recriminaba a las mujeres no cumplir a rajatabla con la vestimenta y no usar el niqab y además promovía actividades de captación entre los miembros más jóvenes de la congregación religiosa granadina.
Mostraba una actitud de signo fundamentalista radical cuando se dirigía a sus fieles exhortándoles para que no acataran la legislación española, repudiando los valores y principios de la Constitución, ya que la consideraba contraria a su interpretación de la “ley de Dios” y propugnaba la firme aplicación de la Sharia.
La expulsión de este ciudadanos marroquí se enmarca dentro de la labor preventiva y de control de la Policía Nacional, con el objetivo de evitar que individuos radicales y con un mensaje violento empleen plataformas de culto para llegar al mayor número de personas.
