Redacción - 19 de diciembre de 2018
Ayer por la tarde un agente de la Guardia Urbana acabó a tiros con la vida de una perra, durante una intervención policial en plena Gran Vía de Barcelona. La perra ejecutada se llamaba Sota, y era la única compañía de un chaval que se ganaba la vida vendiendo pulseras en la calle.
Desde el Partido Animalista (PACMA), han recordado en un comunicado que llevan tiempo reclamando un protocolo de actuación para los policías y cuerpos de seguridad en intervenciones con animales. "No puede ser que la solución a problemas con animales sea pegarle dos tiros. Esto no es el Salvaje Oeste, hay medios y métodos alternativos, y esto es lo que exigimos, su adopción y aplicación", comentan desde PACMA.
Además, desde el Partido Animalista han exigido a la Guardia Urbana de Barcelona la apertura de una investigación que esclarezca lo sucedido. "Son necesarias explicaciones urgentes que determinen los motivos de este procedimiento extremo que ha acabado con la vida de una perra que, según muchos testigos, nunca había actuado previamente de forma agresiva" añaden.
Además, han convocado una concentración urgente para "evitar que este incidente quede impune", que se celebrará este mismo miércoles a las 18:00 horas en la Plaza Sant Jaume (frente al Ayuntamiento de Barcelona) para reclamar justicia para Sota.
"Ayer la falta de protocolos, de formación y de voluntad, se llevo por delante la vida de otro animal. Ojalá Sota haya sido la última víctima", concluyen.
