Redacción - 26 de diciembre de 2018
La cadena de televisión de la Conferencia Episcopal, 13 TV, cerró el 2017 con 10,1 millones de euros de pérdidas según Dicomfidencial.
Estos números rojos se suman a anteriores superando los 84 millones de euros de pérdidas desde que se creara en 2010.
Gran parte de su financiación depende de la asignación tributaria del IRPF que recibe la Iglesia Católica por lo que estas cifras duelen a mucha gente.
Una firma encargada de auditar las cuentas de la empresa en 2016 afirmó que todo apuntaba a “la existencia de una incertidumbre material que puede generar dudas significativas sobre la capacidad de la sociedad para continuar como empresa en funcionamiento”.
Hace un año 13 TV contaba con un patrimonio negativo de 17,4 millones de euros que fue compensado con dinero de la Conferencia Episcopal con una línea de crédito que pasó de 12 a 20 millones durante el 2017.
En abril, en la cadena se ejecutó un plan de recortes que llevó a 40 trabajadores al paro pasando de un gasto de 3,4 millones de euros en personal a 3 millones.
Aún así, la cadena de los obispos no parece remontar el vuelo y tendrá que seguir financiándose de la ‘caridad’ de los ciudadanos que marcan la casilla en sus impuestos.
