Redacción - 15 de febrero de 2019
La mal llamada manifestación “histórica” del pasado domingo en la Plaza de Colón de Madrid, que aglutinó, según Delegación de Gobierno, tan solo a 45.000 votantes de PP, C’s, VOX, partidos falangistas y grupo neonazis, ha hecho que Rivera haya decidido celebrar de nuevo otra marcha patriótica, esta vez en Barcelona.
En Colón subieron al estrado y algunos, a codazos, se pelearon por quién aparecía en primera línea de la foto como fue el caso del popular Javier Maroto y el líder de UPyD. Rivera no quería aparecer en la instantánea junto a Abascal pero no lo consiguió y esta quedará para siempre en su historia política.
Ante la presencia de nuevo de VOX, Manuel Valls, candidato a la alcaldía de C’s, se ha retirado del cartel, por el momento. Esto ha hecho saltar todas las alarmas en Ciudadanos porque de nuevo será noticia que van de la mano de la extrema derecha, un partido que se dice europeísta, y para colmo sin su candidato a la alcaldía.
A la convocatoria realizada por Ciudadanos se han sumado VOX y PP, con lo que volverán a estar juntos agitando banderitas.
A pesar del enorme apoyo mediático, tanto en periódicos, digitales, televisiones y radios, y de llamar a su electorado para celebrar una gran manifestación en la capital catalana hay campañas para recaudar fondos que están reflejando que van a fracasar de nuevo. En una de ellas, el objetivo de recaudación está en 8.000 euros para el domingo, ayer tan solo llevaban 450 euros como reflejó 'Elplural.com'.
Esto podría ser una señal de que el fervor patriotero podría seguir decayendo, y más cuando se dice que hoy Pedro Sánchez convocará elecciones.
Los tres partidos de derechas y ultraderecha, denunciaban un supuesto pacto entre el PSOE y los partidos independentistas “para romper España” y otras mentiras que recogieron en el manifiesto leído por tres periodistas de derechas, María Claver, Carlos Cuesta y Alberto Castillón.
Tras el rechazo de los partidos independentistas al presupuesto del PSOE ha quedado claro que no había pacto alguno y por tanto los motivos para ir a la calle a desgañitarse parecen desinflarse como refleja la ridícula recaudación obtenida.
