Redacción - 18 de febrero de 2019
El hidromiel es una de las bebidas alcohólicas más antiguas de las que se tiene constancia. Su elevado consumo ha quedado probado en multitud de escritos y restos históricos en diversas culturas antiguas pero en España es todavía un desconocido para la mayoría.
Sin embargo, desde 2016 una empresa sevillana, Bodegas Valhalla, está trabajando duro para traer la calidad en sabor y aroma de este producto a los consumidor es españoles. Ahora tras lograr abrirse paso en el mercado español han decidido renovar su imagen con el objetivo de afianzarse en nuestro país y emprender su nuevo gran objetivo: conquistar el mercado europeo.
Con un diseño totalmente renovado, Valhalla lanza su nueva web, traducida a más de seis idiomas y con un diseño moderno, más visual y funcional , que contribuye a reforzar la imagen de marca de esta bodega andaluza. Además, se ha informatizado todo el proceso de gestión y ventas con una suite informática hecha a medida, todo ello, para conseguir que el hidromiel se cuele en nuestros hogares gracias a un solo golpe de click. Una evolución más acorde con los nuevos tiempos, que apuesta por la sencillez y se adapta a las demandas del mercado y a las de sus clientes.
Desde sus comienzos en 2014, donde comenzaron su sueño de traer desde la historia y la fantasía a la actualidad una bebida perdida en el tiempo, el hidromiel, hasta tener puntos de venta en casi toda España a donde distribuyen directamente a través de empresas de mensajería, han pasado solo cuatro años, en los que gracias al esfuerzo y dedicación, han visto como su facturación aumenta cada año y los seguidores de esta bebida “vikinga” no paran de crecer. Su objetivo es reforzar su expansión, desarrollando manuales de calidad en vistas de obtener los certificados ISO y “con el nuevo reto de introducirse en el mercado europeo, con Francia como primer objetivo” en palabras de los responsables del proyecto, Luis Martínez y José Ramón González-Sicilia.
El hidromiel se realiza a partir de tres ingredientes: agua, levadura y miel. La particularidad de sabor de cada hidromiel deriva de las diversas calidades de la miel empleada para su elaboración es la misma relación que existe entre la uva y la calidad del vino.
El otro factor que determina las características de sabor y calidad final del hidromiel es el proceso de fermentación que se realiza durante su elaboración, previo a su filtrado. El tipo de levadura empleada, la temperatura y tiempo de fermentación, junto a las características del filtrado posterior, determinan su carácter final. La receta de un buen hidromiel, que incluye el preciso diseño de todas las fases de producción, es algo complejo y delicado.
Digital Sevilla