Digital Sevilla
12 de mayo de 2019
El pasado 26 de abril se aprobó la desvinculación de Patrimonio Nacional de los derechos funerarios sobre la cripta donde está enterrada Carmen Polo. El BOE recoge la medida que no se comunicó en rueda de prensa sobre el lugar donde el Gobierno de Pedro Sánchez prevé enterrar al dictador tras sacar sus restos del Valle de los Caídos el próximo 10 de junio.
Según detalla Civio, estos derechos pasan a ser propiedad de Patrimonio del Estado pudiendo así el Ejecutivo tomar decisiones directas sobre el panteón. De esta forma podría por ejemplo vender o ceder esos derechos al no contar con la protección de Patrimonio Nacional, que gestiona los bienes del legado de la Corona y de poner algunos de ellos al servicio de la Jefatura del Estado.
Además de palacios, montes y cuadros, también contaba con la titularidad de los derechos sobre esa cripta situada en el cementerio de Mingarrubio, tal y como anunció el propio ente a la familia Franco y adelantó Alejandro Torrús en Público.
“Resulta evidente que la concesión de un título de derechos funerarios sobre una unidad de enterramiento no se relaciona ni ajusta con los fines a que han de destinarse los bienes y derechos integrantes del Patrimonio Nacional, según su Ley reguladora”, establece el decreto publicado hoy en el BOE pasando a ser parte de Patrimonio del Estado.
Tras este cambio administrativo se permitiría la venta o cesión a la familia para que fueran los nuevos titulares y quienes tendrían que hacerse cargo de su mantenimiento.
