Redacción - 15 de mayo de 2019
Un pequeño pueblo de la provincia de Ávila, Gotarrendura, donde se dice que nació Teresa de Jesús, está en el centro de la polémica tras las elecciones generales del 28 de abril.
Según detalla EL PAÍS, el desproporcionado número de votos a favor de VOX podría estar relacionado con por posibles chanchullos en la residencia femenina Villa Santa Teresa.
El centro, que está regentado por monjas esclavas de la Virgen Dolorosa, podría ser donde se han manipulado el voto de las internas que habría causado la victoria de VOX.
La alcaldesa del PP, Yolanda de Juan, ha declarado al diario que la manipulación de las internas es “un secreto a voces”.
El periódico señala que han aumentado el voto de las internas de la residencia que han podido votar esta vez gracias a la reforma de la ley electoral aprobada a finales de 2018 que permite el voto de personas con discapacidad intelectual.
Testigos del pueblo han afirmado a EL PAÍS esta teoría de la manipulación de votos en las residentes de Villa Santa Teresa y señalan que es extraño que la formación de ultraderecha, que suele tener voto masculino, haya tenido esa fuerte subida en el pueblo donde hay un fuerte empadronamiento femenino.
La residencia organizó al parecer un curso relativo a los diferentes partidos que se presentaba a las elecciones para que las internas conocieran sus programas pero no fue objetivo según detallan algunas residentes al diario.
"Nos han dado charlas prácticas sobre los partidos: quién está en contra de la Iglesia o quién está a favor del aborto y la eutanasia", afirmó una de las residentes. Unos cursos o talleres donde parece que el voto debía ir en una sola dirección: VOX.
Desde la dirección de la residencia se niega esta acusación.
"Las hermanas nos dieron la papeleta y nos dijeron que no comentásemos nada", declara una de las internas. Según testigos y la propia mesa electoral del pueblo, tres monjas fueron con las internas a votar y, de hecho, afirman que le dieron a cada una de ellas su sobre y papeleta para que ejercieran su voto. "Todas vinieron con sus sobres preparados", explica Valeriano de Juan, presidente de la mesa, a EL PAÍS.
Este ‘milagro’ de VOX en Gotarrendura coincide con la imputación de una religiosa en Vizcaya que, supuestamente, robó el voto de varias ancianas que la acompañaban para terminar apoyando al Partido Popular. La monja enfrenta penas de prisión situadas entre los seis meses y tres años.
