Redacción - 11 de febrero de 2020
El 17 de enero de 1966 dos aviones de EEUU se estrellaron en los cielos de Palomares (Almería) arrojando cuatro bombas termonucleares sobre dicha pedanía. Dos de ellas se rompieron esparciendo varios kilos de plutonio por la zona.
La superpotencia nuclear activó la llamada operación Broken Arrow (flecha rota, en inglés) para, junto a la dictadura, limpiar la zona. EEUU trasladó a su país un millón de litros de residuos en casi 5.000 bidones. Estos contenedores contenían sobre todo, tierra y cultivos afectados por la radiación dejando atrás 50.000 metros cúbicos todavía contaminados, algo que no se supo hasta el fin de la dictadura.
El accidente, sin embargo, sigue envuelto todavía en el secreto tras cuatro décadas de democracia.
Según detalla El País, la Audiencia Nacional ha solicitado al Gobierno de Pedro Sánchez que desclasifique el Plan de Rehabilitación de Palomares, que actualmente es secreto desde que así lo declarara el CSN, Consejo de Seguridad Nuclear, en mayo de 2010.
Lo grave es que el plan no se ha ejecutado nunca con lo que las tierras contaminadas siguen igual y están depositadas en parcelas de Palomares, pedanía de Cuevas de Almanzora.
Desde el CSN dicen que a pesar de haber pasado casi 10 años, aún no han terminado el informe de rehabilitación.
Ante esta respuesta la Audiencia Nacional ha pedido al Ejecutivo que le informe del tiempo estimado para que se finalice dicho informe y se entreguen los documentos ya elaborados.
Según informa el diario, durante la Administración Obama se cerró una “declaración de intenciones” para que EEUU se hiciera cargo de parte de dicha tierra contaminada pero la situación sigue igual.
Mientras, el plan sigue sin aprobarse de forma definitiva ni se lleva a cabo. Por ello Ecologistas en Acción presentó una demanda ante la Audiencia Nacional en 2017 para que los residuos se almacenaran hasta que EEUU asumiera su responsabilidad de acuerdo al plan de 2010, que sigue siendo secreto.
Desde la Audiencia Nacional se comunica al Gobierno que el plan se desclasificará pero se seguirán las indicaciones procedentes sobre la confidencialidad del contenido.
