Digital Sevilla
12 de julio de 2019
La XIII comenzó el pasado 21 de mayo y, como viene siendo habitual, el Congreso gastó una gran cantidad del dinero de todos en "equipar" con la última tecnología sobrevalorada de la conocida marca de productos sobrevalorados Apple.
Entre otras cosas, cada diputado recibió un iPad Pro, el modelo más caro de las tabletas de la marca de la manzana mordida, cada uno de ellos valorado en unos 1.200 euros.
El Congreso presupuestó inicialmente 587 mil euros para la compra de dispositivos, sin que directamente se decantaran por el iPad Pro.
Finalmente la empresa Asseco, distribuidora de Apple, se llevó la contratación, en la que se exigían una serie de requisitos que hacía prácticamente imposible la compra de otro aparato que no fuera de Apple, como por ejemplo que el sistema operativo tenía que ser "iOS 12 o posterior".
Este tipo de compras siempre levantan mucho revuelo, especialmente en las redes sociales, donde se critica que existen alternativas más económicas a las de Apple.
Sin embargo, las aplicaciones que utilizan los diputados, como la del voto telemático, están desarrolladas en exclusivas para el sistema iOS que al ser más cerrado que Android se presupone más privado y seguro para estos menesteres.
