Redacción - 4 de noviembre de 2018
La carrera política de María Dolores de Cospedal podría finalizar en horas. Las grabaciones del comisario Villarejo publicados por Moncloa.com, destapan que, tanto la ex secretaria general del PP, como su marido, Ignacio López del Hierro, pagaron, supuestamente con dinero del partido, por servicios del comisario retirado para espiar a Javier Arenas, por entonces presidente del PP en Andalucía, por sus vínculos con Luis Bárcenas, Gerardo Galeote y la trama Gürtel.
Aunque la mayoría de los medios no se han hecho eco de ello, en los audios se apunta que el PSOE andaluz tenía trincado a Arenas porque conocían que su hermano trabajaba para Bárcenas.
Cospedal acababa de llegar al partido, y realizó estas reuniones secretas bajo el mandato de M. Rajoy, del cual la mayoría de los medios se olvidan.
Según publica El Mundo, Soraya Sáenz de Santamaría es la principal sospechosa de la filtración de estos audios.
“La pareja lleva toda la semana buscando al responsable de esa filtración y sospecha que se debe a una vendetta de Soraya por apoyar a Pablo Casado en el Congreso del PP" detalla el diario añadiendo que tanto Cospedal como López del Hierro creen que Soraya "se encuentra orquestando una operación para acabar primero con Cospedal y luego ir a por el líder del PP".
Estas grabaciones ya salpicaron al diario Público, a Soraya Sáenz de Santamaría (como responsable de la caída de Cifuentes), así como a Cospedal y su marido.
Seguramente mañana empezará la semana con otro capítulo de la novela por entregas que ocurría a espaldas de los ciudadanos.
