13 de febrero de 2019
Las webs de juegos online, los casinos y las casas de apuestas, no paran de crecer sin que desde el Congreso de los Diputados se tomen medidas urgentes y contundentes para frenar la ludopatía, una enfermedad que cada vez hace más daño a más jóvenes en España.
El negocio multimillonario, que siempre manejó la mafia como lavadero de dinero negro, sigue dando enormes réditos a muchos medios de comunicación. No es un tema que se hable en las tertulias políticas de grandes cadenas privadas que se forran gracias a este tipo de publicidad (103 millones para Atresmedia y Mediaset), tampoco curiosamente en las tertulias políticas públicas.
En el 2018 se difundieron tres millones de anuncios de apuestas según la Federación Castellano y Leonesa de Jugadores de azar rehabilitados (FECYLJAR). Estos anuncios copan el 45% de las publicidad en las retransmisiones deportivas en la radio y el 20% de la publicidad en un partido de fútbol.
La Sociedad Española de Patología Dual (SEPD) ha publicado un informe que refleja que la prevalencia de la ludopatía se sitúa entre el 1% y el 2% en los adultos, pero este porcentaje se multiplica en los adolescentes hasta el 8%.
Los jóvenes se hacen cada vez más adictos al juego sin que los diputados pongan freno a la publicidad en horario infantil y masiva en las retransmisiones deportivas.
Por su parte, los expertos señalan que la inmadurez del cerebro de un adolescente, provoca la falta de control, haciéndolos mucho más vulnerables al juego online.
El poder acceder a este peligro para sus vidas sin casi ningún control los puede convertir en adictos en muy pocos años. Con un par de clics, desde tu propio móvil, has apostado, comprado un cartón de bingo o entrado en una partida de póker.
Pero el negocio crece y crece, en el 2018, gracias a nuestros diputados, 250.000 personas se han convertido en nuevos usuarios del juego online.
Famosos como Carlos Sobera, Belén Esteban (todavía es una estrella de Telecinco) o Cristiano Ronaldo nos animan a jugar en televisión, muchas veces en horario infantil.
En 2012 los jugadores de azar por Internet eran 2 millones, en 2015 ya eran 5 millones. Se jugaron 8.600 millones de euros, un 32% más que el año anterior y el año pasado se multiplicó hasta los 12.000 millones.