Miguel Ángel Olimpo - 14 de octubre de 2019
Las finanzas son asunto de extrema importancia, la base de una estabilidad económica. Tanto para particulares como para empresas es indispensable una planificación que mantenga un estado financiero sano a la vez que permita el crecimiento.
Uno de los aspectos que ayuda al proceso de proteger las finanzas es la definición de metas precisas, por ejemplo, la obtención de un crédito para determinada inversión. De esta manera es más fácil idear un plan que favorezca el ahorro y mantenga los gastos controlados, así como obtener el mayor beneficio de una serie de herramientas financieras disponibles.
En ocasiones es inevitable afrontar deudas, los motivos pueden ser variados, por ejemplo un problema de salud o un imprevisto en el hogar, alguna circunstancia que haya exigido la disposición de una cantidad de dinero en poco tiempo, porque lo más importante es solucionar la urgencia.
En la actualidad existen diferentes empresas que ofrecen la posibilidad de obtener creditos online en el acto, de gran utilidad para solucionar problemas puntuales porque son gestionados de manera muy fácil, sin complicados trámites.
Cuando el cliente solicita el crédito rápido, se realiza un convenio de pago que especifica el porcentaje de interés que genera la solicitud, así como el tiempo para cumplir con la devolución. Si es aprobado, en pocos minutos el solicitante podrá disponer del dinero.
Pero al igual que cualquier compromiso de pago, es necesario cumplir con la fecha acordada y así evitar futuras complicaciones financieras que se traducen en el incremento de los intereses que el crédito ha generado.
Las oportunidades para realizar inversiones pueden ser escasas y cuando se presentan no deberían dejarse pasar. Pero la liquidez puede ser un factor limitante. Para evitar perder oportunidades, existe una alternativa que es la solicitud de un préstamo.
Los préstamos por lo general exigen una garantía y una alternativa es solicitar un prestamo por tu coche, una posibilidad orientada a propietarios de vehículos que permite adquirir dinero de una manera rápida y segura, sin dejar de utilizar el coche.
Este tipo de transacción permite obtener la liquidez requerida para realizar alguna inversión sin necesidad de utilizar algún tipo de ahorro personal, sólo exigen cumplir con el compromiso de pago de manera oportuna y así evitar recargos.
A diferencia de los créditos rápidos, en los préstamos la cantidad de dinero que es posible solicitar es superior, el tiempo de devolución es planificado junto a un asesor y se adaptará a las necesidades del solicitante.
Una tarjeta de crédito es un instrumento financiero que aporta grandes beneficios al tarjetahabiente, mientras sea utilizada de manera adecuada.
Por lo general esta herramienta se adquiere a través de entidades bancarias, sin embargo, hay otras alternativas como el caso de la tarjeta de Ikea, una tarjeta de crédito VISA gratuita que no genera gastos de emisión, ni de mantenimiento.
Aunque esta tarjeta es emitida por Ikea, su uso no se limita a esta cadena de tiendas, también puede ser utilizada como medio de pago en cualquier establecimiento que acepten tarjetas VISA, incluso a nivel internacional.
Existen otras ventajas asociadas como la opción de optar por un plan de protección de compras, aparte de la posibilidad de fraccionar el pago de las compras realizadas y si estas fueron en las tiendas IKEA, este será sin intereses, de tal manera que el tarjetahabiente pueda planificar el cumplimiento de sus compromisos de pago. De esta manera se obtienen todos los beneficios y sin afectar las finanzas.
El vertiginoso estilo de vida actual, especialmente en ciertas áreas laborales, puede hacer necesario el traslado de trabajadores hacia otros países. Entre las varias dudas que le surgen a alguien que debe radicarse en otro país están las relacionadas al tema de impuestos.
Una de las inquietudes más frecuentes es la aplicación de la planilla modelo 210 que está destinada a la liquidación del Impuesto Sobre la Renta de No Residentes. Lo primero que el trabajador debe conocer es su residencia fiscal.
En España, se considera residente a quien cumpla alguna de las siguientes condiciones.
Si el trabajador no es residente español, pero ha realizado operaciones tales como ventas de acciones, tener un inmueble, alquilar o vender bienes inmuebles en España, debe liquidar sus tributos a través de la planilla correspondiente, en el periodo de tiempo estipulado para evitar compromisos de pago adicionales.
