Digital Sevilla
7 de junio de 2018
En la tertulia política de El Programa de Ana Rosa de Telecinco se ha analizado el nuevo Consejo de Ministras y Ministros de Pedro Sánchez. Entre los tertulianos estaban Montserrat Domínguez, directora del Huffington Post en España, Verónica Fumanal experta en Comunicación y ex jefa de Prensa de Pedro Sánchez, Pilar Gómez, subdirectora de La Razón y José María Olmo, periodista de El Confidencial.
Durante el programa, Ana Rosa Quintana, firme defensora de Susana Díazy su golpe número 33 en el partido, en aquella ocasión contra Pedro Sánchez, dijo un tanto nerviosa:
“Perdonadme, Pedro Sánchez, hubo un momento en el que se le fue la cabeza. Es verdad. Bueno un poco. Y cuando se empeñó en el ‘no es no’, aquí hay que decir las cosas como son, en bajar por la Carrera de San Jerónimo del brazo de Pablo Iglesias y luego de repente, es verdad...”
En otro momento de la tertulia José María Olmo opinaba que Pedro Sánchez había sido un irresponsable por presentarse a la investidura en 2016 a lo que Verónica Fumanal le respondió:
“La irresponsabilidad fue de Rajoy que le dijo no al rey a la hora de formar gobierno, del partido que había ganado las elecciones. Vamos a hacer una revisión real.”
Ante estas palabras Ana Rosa Quintana inmediatamente le cortó y dijo: “Yo creo que la gente en su vida política y profesional, todo el mundo tiene momentos, y hay aciertos y hay errores. Y Pedro Sánchez ha ido de estupendo a peor, ahora vuelve a ser estupendo. Pero eso es así.”
Mientras, Olmo, en el lado derecho de la mesa, repetía: ¡No sabemos lo que piensa! ¡No sabemos lo que piensa!
Tras esto Ana Rosa Quintana siguió criticando la posición de Pedro Sánchez en contra del viejo aparato del partido y los barones, justificando el golpe de Susana Díaz contra su secretario general.
Ante estas palabras, Verónica Fumanal, que llevaba un rato intentando exponer su punto de vista dijo:
“Un apunte, si Pedro Sánchez no dice ‘no es no’, no se va a su casa; que dejó el acta de diputado, y luego se presenta como un militante de base a las primarias no las gana y hoy no estaríamos aquí. Entonces no fue una equivocación, fue un acierto estratégico porque se presentaron tres candidatos, votaron el 80% de la militancia (...) y ganó con el 52% de forma mayoritaria y por lo tanto era lo correcto.”
