18 de abril de 2024
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El Gobierno ultima la prohibición de los cubiertos de plástico

El Gobierno ultima la prohibición de los cubiertos de plástico

Redacción - 1 de junio de 2020

Residuos de plástico contaminando una playa

El Gobierno planea aprobar el próximo martes un ambicioso paquete de medidas para luchar contra la emergencia climática y promover la economía circular y el reciclaje. Entre otras cosas, la nueva normativa prohibirá a partir del próximo 3 de julio de 2021 la venta de bastoncillos de algodón, cubiertos (tenedores, cuchillos o cucharas), platos desechables, pajitas y agitadores de bebidas que estén fabricados con plásticos.

Además, todos los establecimientos de restauración estarán obligados a dar agua no envasada de forma gratuita. Estas dos importantes normas, son solo algunas de las medidas que contempla aprobar el Gobierno el próximo martes en el Consejo de Ministros para hacer frente a la gran amenaza de nuestro siglo: la Emergencia Climática.

El ejecutivo de Pedro Sánchez espera así recudir a la mitad la comercialización de este tipo de productos de plástico en los primeros seis años y en 2030 se plantea como objetivo lograr que la reducción con respecto a la venta actual sea del 70%.

Entre las excepciones para las que sí se permitirá la venta de estos productos está la de su uso con fines sanitarios (hospitales u otros centros en los que se precise).

Pero hay mucho más. La nueva norma también pone el foco en los productos desechables que acompañan la venta de comida rápida y que también están fabricados con plástico. Así, a partir de 2023 quedará completamente prohibida la distribución gratuita de tapas de vasos y cualquier otro tipo de producto desechable fabricado con plástico.

En caso de ser imprescindible para el producto a vender este deberá ser cobrado al cliente final y aparecer de forma diferenciada en el comprobante de compra, de manera similar a como ya funciona la venta de bolsas de plástico.

En el plano de la Economía Circular se planea implementar también nuevas medidas para lograr de forma progresiva reducir a la mitad el desperdicio de alimentos en el año 2030 con respecto a los datos de 2010.